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Según el gobernador encargado de Tumbes, José Alemán Infante, la gerencia de Infraestructura es una de las más importantes en cuanto a la puesta en marcha de proyectos; no obstante, ha designado a personal cuestionado, que incluso figura con presunta responsabilidad penal, civil y administrativa en auditorías efectuadas por la Contraloría.
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En esa situación se encuentran el gerente de Infraestructura Lenin Ávila Silva y el subgerente de Estudios y Proyectos del Gobierno Regional de Tumbes (GRT), Roger Florencio Morán Rivera.
Las investigaciones, en algunos casos, han motivado la intervención de la Fiscalía Anticorrupción, por la aparente afectación a entidades del Estado, entre ellas el propio gobierno regional.
Grave
En el caso de Lenin Ávila, pesan sobre él cuatro servicios de control posterior publicados en la web de la Contraloría, consistente en dos auditorías y dos servicios de control específico a hechos con presunta irregularidad, donde se le ha encontrado responsabilidad penal, civil y administrativa.
La supuesta responsabilidad penal recae en la elaboración, revisión y aprobación de expediente técnico; convocatoria, otorgamiento de la buena pro y ejecución del contrato de la obra “Mejoramiento y desarrollo turístico del Malecón de Zorritos. Componente: Reubicación de la cámara de bombeo de Miguelayo”.
En el caso de Morán Rivera, de los cuatro servicios de control posterior, en tres de ellos, le han identificado presunta responsabilidad penal.
Uno de ellos es por la aprobación del expediente técnico, actos preparatorios y proceso de selección de obra “Mejoramiento de la carretera Zarumilla - El Bendito”.
Ambos funcionarios laboraron en la gestión del exgobernador Ricardo Flores, investigado por corrupción y han regresado al Gobierno Regional de Tumbes de la mano de José Alemán.
