Mujer policía reduce a ladrón y recupera dinero
Mujer policía reduce a ladrón y recupera dinero

Valentía. Pamela Carreño Dioses, suboficial de tercera de la PNP, en un acto heroico recuperó 7 mil 650 nuevos soles y mil 170 dólares americanos, que dos sujetos habían arrebatado a un cambista, en pleno centro de la ciudad.

Todo ello sucedió tras perseguir a los delincuentes que fugaban con el motín, robado en el paseo La Concordia. La valiente policía contó con el apoyo de otro efectivo.

ATRACO. El hecho se registró cerca a las 8:00 de la mañana de ayer, después que dos hampones provistos de un revólver, encañonaron al cambista Martín Barreto Valderrama, en el paseo La Concordia, el mismo que se dirigía al Paseo Libertadores para iniciar con su trabajo de siempre.

Los facinerosos responden al nombre de Wilmer David Risco Torres (20) alías “Colorado” y a Franklin Neyra Huamán (23), quienes, según las investigaciones del personal policial, serían integrantes de la banda delictiva “Los Malditos de la Curva”.

MOVIMIENTOS. Los sujetos le habrían hecho seguimiento a Barreto Valderrama desde hacer varios días y actuaron aprovechando la soledad de la calle.

El cambista transitaba con normalidad cuando entre la intersección de la calle San Martín y Piura, fue sorprendido por dos hampones con un revólver calibre 38. En segundos le arrebataron su bolso (“canguro”), donde llevaba la suma de 7 mil 650 soles y mil 170 dólares. Emprendiendo la huida con dirección hacía el barrio San José.

PERSECUCIÓN. La víctima desesperado empezó a gritar pidiendo apoyo, para la suerte de éste, cerca a la escena del robo se encontraban dos policías, quienes al ver a los culpables del robo empezaron a seguirlo. Los delincuentes pasaron veloces por la calle Piura, luego por la calle San Francisco, para finalmente enrumbar por el jirón Bolívar; siendo finalmente alcanzados en la intersección de Bolognesi y Grau, a la altura del restaurante “Bahía”.

¿SUERTE? En este lugar uno de los interceptados apuntó con el arma de fuego contra Pamela Carreño, pero la suboficial no retrocedió, dejó sus miedos y con paso firme avanzaba. Sin embargo, el hampón no esperó y disparó contra ella. Para la suerte de la sub oficial, el gatillo se atascó.

Los sujetos fueron reducidos y se recuperó en su totalidad el dinero robado.