El traje alusivo a la diablada, tradicional danza que se ha extendido entre las diversas festividades altiplánicas, que lucirá Miss Perú Universo, Karen Schwarz, en la 58 gala del concurso de belleza a celebrarse el 23 de agosto en las Bahamas, levantó polvareda en Bolivia en los medios y la propia reina de belleza local. Acción inmediata, el ministro de Cultura boliviano, Pablo Groux, acusó a nuestra representante Karen Schwarz de lo que sería “una apropiación indebida del patrimonio cultural boliviano”, por lo que se envió una misiva de reclamo al gobierno peruano. Sostuvo además que la diablada es parte del catálogo del Carnaval de Oruro, festividad reconocido desde 2001 por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. La respuesta no se hizo esperar por parte del canciller García Belaunde, quien en rueda de prensa opinó que “la cultura del Altiplano es una sola. Si la señora (Schwarz) es peruana, tiene tanto derecho a usar la diablada”. Agregó que estuvo en una fiesta de La Candelaria, en la región peruana de Puno, “y entiendo que es igual en Oruro y otras regiones de allá”. El Instituto Nacional de Cultura (INC) también aclaró que “el uso de una prenda inspirada en la diablada puneña y altiplánica no constituye ninguna apropiación del patrimonio cultural de otro país, pues la diablada también forma parte del patrimonio cultural del Perú”. Acotó también que tal festividad en homenaje a la Virgen de la Candelaria fue declarada como Patrimonio Cultural de la Nación mediante Resolución Directoral Nº 655/INC el 2 de setiembre de 2003. SE DEFIENDE. El experimentado diseñador del polémico traje, Ricardo Dávila, indicó que “Karen no tiene por qué cambiar de vestido porque se ha copiada a la diablada boliviana, mi traje es basado en una danza costumbrista de Puno”.