Denisse Dibós se enamoró del ballet, el teatro y la música desde pequeña. Por eso, apenas culminó el colegio viajó a Estados Unidos para estudiar y convertirse en pianista y directora musical. Sin embargo, una fuerte lesión en la muñeca la obligó a poner pausa a sus sueños. Fue entonces cuando regresó a Perú para descansar -hace más de 20 años- y dirigió su primer musical en un colegio. “Voy a extrañar el piano el resto de mi vida, pero por algo pasan las cosas”, reflexionó en aquel entonces, aunque no con resignación, sino con un nuevo norte. Tiempo después asumió un reto que hoy la llena de orgullo: se convirtió en directora de Preludio, la importante productora de musicales.
En un contexto aparentemente no tan favorable para el teatro, ¿cómo recibes el aniversario de Preludio?
Durante varios años hubo un boom y tiene mucho que ver con la economía del país y temas de coyuntura. En general, creo que el teatro viene creciendo sostenidamente en los últimos 10 años. Hay una curva que se va elevando con respecto a nuevas producciones o pequeños montajes, como microteatro. Yo creo que desde el medio artístico hay una gran motivación por diversificarnos y buscar alternativas.
¿Cuál es la actual situación en el tema de financiamiento del mundo de las tablas?
Nosotros teníamos una gran esperanza en este 2017, con la llegada de un gobierno serio que iba a construir nuevas cosas y de pronto pasa todo lo que pasa, como los desastres naturales, los escándalos de Odebrecht, que como una serie de dominó afectan al teatro. Por ejemplo, este año por estos dos motivos ha sido más complicado obtener auspicios de las empresas privadas. Como productora siempre tengo que ver lo que sucede en el país. No hay nada seguro, pero sí siento que en el público hay unas ganas tremendas de consumir buen teatro y eso me alienta muchísimo.
¿El público peruano siempre conectó con el teatro musical?
Hemos hecho un trabajo de hormiga por educar a un público y atraerlo hacia los musicales. El primero que trajo este formato fue Osvaldo Cattone, pero vino la crisis económica y lo dejó de hacer. Nosotros empezamos con nuestro primer musical, “La novicia rebelde”, hace 20 años, y fue un éxito brutal en taquilla, llenamos los 3 meses en el teatro Peruano-Japonés y tuvimos que reponerlo en Montecarlo, que ahora es un edificio más. Se perdió un espacio lindísimo.
¿Cómo surge la idea de hacer un musical de Chabuca Granda?
La idea inicial se viene gestando casi desde los inicios de Preludio cuando mi hermana Rina me dice: “Tenemos que hacer un musical de Chabuca. Olvídate de los musicales de Broadway”. Yo le respondí que aún no teníamos la experiencia para crear un musical de cero, eso iba a tomar un tiempo. Y sí, tomó casi 20 años. Al final de una presentación en el 2015 hicimos un bloque peruano. Teníamos un par de temas de esta artista nacional y fue un éxito. Veías las caras de las personas con ganas de pararse y bailar, ahí pensé: “Estamos listos”.
¿Cuáles eran las dificultades por las que no se sentían preparados para este reto?
En el teatro musical, cuando el actor ya no puede comunicarse más con las palabras, entonces canta y baila. El canto y el baile no pueden ser disciplinas de virtuosismo puro. En el teatro musical ambos te tienen que contar una historia y eso al inicio no era fácil.¿Cómo fue el proceso de creación? Primero hice un borrador donde elegí los temas de Chabuca que a mí me interesaban y lo compartí con Teresa, su hija. Le pregunté si el musical se podía llamar “Déjame que te cuente”. Ella aprobó el título y la elección de las canciones. Entonces cité al director general, musical y a los coreógrafos y empezamos a trabajar. Nos enamoramos de la versatilidad y genialidad de las composiciones de Chabuca.
¿Cuáles son algunas de las actividades programadas para este aniversario?
Este año también presentamos “El test” en el teatro Marsano que ya se estrenó. En octubre y noviembre reponemos “Bajo terapia”, una comedia que tuvo mucho éxito el año pasado en el teatro Vargas Llosa y en setiembre tenemos reservado el Gran Teatro Nacional para hacer el concierto de gala de Preludio, una presentación de pequeños momentos de los musicales que hemos hecho.
Eres mamá, productora y actúas, ¿cómo te organizas?
Antes yo decía: “¿Cómo haré?”. Pero no tengo mucho tiempo para el ocio. No veo televisión, me despierto temprano. En los días como los de ahora, de estreno, es un poco difícil, pero luego retomo mi yoga en las mañanas, que es lo que me mantiene cuerda. Ni siquiera tengo que pensarlo mucho, es chambear y chambear.
DATO
Denisse Dibós, actriz, directora y productora. Estudió para ser concertista de piano durante ocho años en Estados Unidos. Como actriz ha trabajado en teatro, televisión y cine.