El veterano vocalista de El Gran Combo de Puerto Rico, Luis 'Papo' Rosario, y los consagrados Charly Aponte y Jerry Rivas regresan a Lima para ofrecer un nuevo concierto este viernes en la discoteca Vocé Sur y deleitar a sus fieles seguidores.
En diálogo con Correo, 'Papo' prometió tocar sus temas más exitosos y manifestó además su deseo para que las nuevas generaciones salseras tengan mayores oportunidades ya que "las grandes figuras vamos desapareciendo".
CORREO: ¿Qué significa para usted regresar nuevamente a Lima?
LUIS ROSARIO: Tengo una familia en Lima, hemos hecho una gran amistad. Cada vez que regreso me lleno de emoción, de alegría, porque puedo ver a mis amistades.
C: Con su experiencia, ¿por qué no vemos surgir nuevas orquestas de salsa exitosas como El Gran Combo?
LR: Lo que sucede es que las radioemisoras no le dan la debida importancia y así el trabajo de los nuevos grupos se hace muy difícil. Hay muchachos que están haciendo un excelente trabajo, pero tienen que hacer muchos sacrificios, invirtiendo su propio dinero para ser escuchados en la radio. Más adelante eso tendrá que cambiar, porque las figuras grandes vamos desapareciendo. Nada es perpetuo, no vamos a vivir solo de recuerdos. Hay que darle oportunidad a las nuevas generaciones.
C: ¿Cuál es la diferencia entre Fania All Star y El Gran Combo?
LR: El Gran Combo es un grupo de músicos que ha permanecido unido por varios años. Las estrellas de Fania, pues, son estrellas. Tiene y sigue teniendo las figuras más importantes y sobresalientes de los distintos grupos. Lamentablemente, ha perdido fuerza y vigencia.
C: ¿El saxofonista Eddie Pérez podrá regresar a la orquesta?
LR: Eddie Pérez está muy delicado de salud, tiene diabetes, presión alta y mala circulación. Ha sido un poco irresponsable por no cuidarse. Por ese motivo, le sugerimos que descanse, pero no lo hemos despedido. Él mintió y nos sentimos sumamente dolidos por lo que dijo a la prensa internacional. Cuando el médico diga que está apto para trabajar, él se unirá nuevamente a nosotros. Existe el perdón y el arrepentimiento. Todo el mundo comete errores. ¿Por qué no perdonarlo?