"Fue el peor momento de mi vida profesional"

El conductor del programa dominical Punto final, Nicolás Lúcar, recordó difíciles momentos que vivió en el 2001 cuando presentó en el fenecido Tiempo nuevo un video del entonces miembro de seguridad de Vladimiro Montesinos, Ronald Pereda Díaz, quien trató de involucrar al ex presidente Valentín Paniagua en la red de corrupción.
Aquellas imágenes causaron indignación en Paniagua y sus partidarios, generando una investigación que obligó a Lúcar a "empacar" y refugiarse temporalmente con su familia en Costa Rica.
"Nunca pude hablar con él (Valentín Paniagua). Le mandé una carta y nunca me contestó. Hablé con gente cercana. Fue una carta muy privada donde le decía que estaba arrepentido de haber puesto al aire ese material, que me sometía a cualquier investigación y que me apenaba todo lo ocurrido. Entiendo que él la recibió, la leyó y nada más, no hizo ningún comentario. Fue un momento complicado para mí, no decidí con la suficiente sabiduría y serenidad. Pienso que ese fue el peor momento de mi vida, desde el punto de vista profesional", comentó.
Tras su paso por La revista dominical y Tiempo nuevo, Nicolás Lúcar regresó a la televisión peruana hace tres años y medio con Día D de ATV y, desde hace dos años, conduce uno de los programas periodísticos más importantes del país, Punto final.
"Fue muy duro regresar por el cargamontón que tuve, me dieron con todo porque no estuve de acuerdo con la rereelección de Alberto Fujimori. Me acusaron de varias cosas y sin derecho a réplica. Me sentía desesperado, impotente por no poder contestar, aclarar y decir mi verdad. Perdí todo lo que tenía, lo que había ganado, todo lo que había construido en casi diez años de trabajo continuo en la televisión. Fue el alto precio por no estar de acuerdo con un régimen. Hubo la necesidad de destruirme. Y al final de la historia, mira dónde estoy, he resistido y estoy conduciendo uno de los programas más exitosos de la televisión peruana", agregó.
Finalmente, el conductor de Punto final comentó que ya inició las negociaciones para renovar por tres años con Frecuencia Latina, aunque él aspira quedarse muchos más años en la pantalla chica.
"Acá nos dieron la libertad de decir lo que pensamos y hacer lo que sentimos. No tenemos interferencias y eso ha sido importante para mi equipo. Aquí, aunque suene huachafo, somos como una familia. Nosotros seguiremos peleando para ser los mejores y alcanzar esos índices de sintonía que tuvimos en años anteriores", expresó Lúcar.