Katy Perry, máxima nominada de la noche, logró el premio al mejor video del año por 'Firework' en la entrega anual de los MTV Video Music Awards.
Perry dedicó el premio a sus fans y a su esposo Russell Brand que estuvo a punto de estallar en llanto desde su butaca, Perry quien llegó luciendo un vestido estilo chino en tono verde agua se había cambiado de vestuario, tocado con un sombrero en forma de cubo enorme.
La cantante estadounidense, recibió tres galardones y se convirtió en la gran vencedora de la 28 edición de los Video Music Awards, los premios del canal MTV dedicados a los mejores vídeos musicales del año.
Perry, que partía como favorita con nueve candidaturas, se llevó además la estatuillas a los mejores efectos especiales y a la mejor colaboración, ambos por "E.T.", junto a Kanye West.
EFE