La música no solo es un instrumento artístico, sino una vía de expresión y opinión donde el protagonista hace gala de su talento y pensamiento. Mac Salvador, originario de Nasca, es una muestra de ello. Bajo esta premisa, el cantante prepara un íntimo concierto donde revelará sus composiciones junto a la Sinfónica Nacional.
¿Por qué lo han apodado “El Loco”?
Porque soy muy alegre, perfeccionista, querendón, pero a la vez renegón. Tengo todas las virtudes y defectos del mundo.
Con todas las virtudes se refiere a...
Que soy muy talentoso en todos los aspectos de mi vida. Desde construir mi casa, componer mi música, criar a mi hijo solo, hasta el trato con la gente que quiero. Hay que desarrollar un talento para todo, y el mejor don que uno puede tener es ser humano.
¿Y qué es ser humano para usted?
Ser buen amigo, ciudadano, hermano, hijo. Yo creo que todos tenemos esa capacidad, solo que preferimos no autoevaluarnos y no queremos sacar el Cristo que llevamos dentro. Hay que dejar que se manifieste, ya que él está presente desde que nacemos.
Dentro de todos los sucesos difíciles de su vida, ¿hay alguno que venga a su memoria en este momento?
A estas alturas de mi vida, ya no existen momentos así. Todos son buenos. Antes de que me dedicara por completo a la música, atravesé por muchos episodios malos, el peor de ellos fue cuando me quedé solo en la calle porque a mi papá lo metieron preso y mi mamá estaba en otra ciudad. Viví dos años por mi cuenta y experimenté lo peor. Por mucho tiempo renegué de esa realidad y me volví rebelde, protestaba mucho. Sin embargo, todos estos sucesos los transformé en algo positivo, ya que fue lo que me tocó vivir. Aprendí a canalizar lo malo y transformarlo en algo bueno.
Entonces, ¿qué generó esta etapa en su vida?
Gracias a ello maduré mi estado mental y filosófico. Considero que más que un cantante, soy compositor y filósofo; en el trayecto de mi vida hice lo mejor que pude.
¿Y cuál es su filosofía?
Vivir con lo que te toque. Como artista trato de que las personas sean un poco más felices a través de mis letras.
¿Cuál es el público que desea cambiar?
A los niños y jóvenes, pues cambiar el pensamiento de los mayores es complicado. Hay muchas cosas que se deben limpiar en la sociedad. Considero que el peruano debe ser más decente ya que uno no funciona solo sino en contexto con los demás. La corrupción es algo con lo que no se debe seguir, y no me refiero necesariamente a la que se encuentra en la política, sino en el propio hogar. Por ejemplo, la diferencia de género que permanece entre un hijo varón y una mujer.
¿Se siente un líder de la música andina?
Yo no me siento un líder. A pesar de que me dediqué muy tarde a la música, y esta no era una opción para mí, yo me inclinaba más a los estudios. No obstante, cuando falleció un amigo que deseaba que yo trabaje en la composición de melodías, todo en mi interior cambió; me dije a mí mismo que si tenía un talento debía desarrollarlo. Pienso que cualquier amante de este género puede ser un líder. Sin embargo, sí puedo decir que encabezo una lista de artistas que no siguieron un estilo boliviano.
¿Considera que es un artista de un solo género?
No lo creo. Mis composiciones se caracterizan por ser trovas. Se trata de una forma de expresar los pensamiento y filosofía, pero de forma cantada y, además, sin tener una nacionalidad. No obstante, también tengo otro ritmo llamado taneando, que nace de la fusión de la música negra y el zapateo puquiano. Es un homenaje a la tierra de mi padre y mi madre.
DATO
Mac Salvador, cantante y compositor. A los 16 años compuso su primer sencillo, “Yo… el loco”, con el que halló un refugio en la composición para dar vida a otros grandes temas como “Hijos de la calle” y “Quiero un cambio”.
16 años se inició en la composición musical.
16 octubre será el esperado concierto junto a Pelo D’ Ambrosio.