Denisse Dibós: "“’Melcochita’ me ha dado clases de ‘lleca’”"

Denisse Dibós es una rubia guapa, simpática y risueña. Tiene demasiada paciencia y, sobre todo, mucha “correa”.

Pero como toda persona que merece respeto, la actriz ha rechazado los insultos que recibió en redes sociales por no entender la frase de Pablo Villanueva, “Melcochita”: “¡No vayan!”.

Sin embargo, Denisse Dibós, quien cultiva el arte de tocar el piano desde pequeña, ha volteado la página para estrenar hoy El Musical 2015. Broadway, color y cajón, una obra que por primer vez incluye los ritmos de la costa en fragmentos de los emblemáticos musicales de Broadway que ella ha adaptado en Lima como productora con Preludio.-

¿Qué verá el público en este nuevo musical?

Vamos a hacer fragmentos de musicales de Broadway, como Chicago, Cabaret, Amor sin barreras, Jesucristo Superstar, Evita, Los Miserables y cerraremos con un final de fiesta peruano, que va a incluir música de Chabuca Granda y el Toro Mata. En el recorrido de la obra verás que Broadway se va peruanizando, donde los movimientos estilizados se rompen al dar paso a un festejo o a una marinera. Esto es un buen punto de partida futuro.

¿Le cuesta a usted encontrar artistas que puedan desenvolverse en este formato?

Es difícil encontrar aquí a alguien que te cante, te baile y te actúe. Pero en este musical el grueso del elenco ya está en ese nivel. Además nos apoyamos en bailarines profesionales que son los que te hacen el tema virtuoso.

Resulta inevitable preguntarle sobre su anécdota con “Melcochita”. ¿Todo fue espontáneo?

Claro. Fue natural. Yo le pedí mil disculpas por no reconocer su frase célebre. Yo me acordaba más de “¡imbécil!”, pero “¡no vayan!” no lo tenía registrado. Mi preparación para la entrevista con él era más por el tema de sonero. Yo estaba concentradísima porque, lo confieso, es bien difícil seguirle la conversación, se va por aquí, se va por allá, te bromea, se ríe y tú ya no sabes dónde estás. Yo estaba así, mirándolo fijamente, súper seria y él dice “¡no vayan!”. “¿No vayan a dónde?”, digo yo, de lo más tarada y, bueno, me bulearon una semana entera. Ahora yo tengo harta correa para que me troleen, pero lo que no tolero son los insultos. Me han dicho cosas horrorosas, “gringuita de m”, “si te encuentro en la calle te quemo viva”, “quédate en tu burbuja, gringa de m”, etc..

“Melcochita” ahora es tu amigo...

Hemos leído juntos los tuits, nos hemos matado de la risa y me trataba de dar clase de “lleca”. Patas con “Melcochita”. Creo que es la misma gente la que divide. Eso ya aburre. Yo soy tan peruana como cualquiera. Tengo tanto derecho como cualquiera.