Una vez fuera de GENESIS, el cantante se tomó un tiempo para iniciar su carrera solista, estrenando su autotitulado LP en 1977 que produjo un primer hit, aunque no masivo pero sí con poder suficiente para llamar la atención: Solsbury Hill, que para algunos aludía a su pasado reciente. Obviamente que hubieron algunos cambios de estilo para marcar diferencias, con más introspectiva lírica y concentrándose más en las bases rítmicas y en melodías más accesibles que en los extensos y densos pasajes y paisajes sonoros típicos de su ex banda. Los siguientes tres discos también fueron autotitulados y fueron consolidando la nueva fórmula, produciendo temas memorables como On The Air, I Don?t Remember, Games Without Frontiers, Biko; pero para efectos mercantiles, en EE.UU. el cuarto LP fue denominado SECURITY (1982), que finalmente le dio un éxito súper rankeado, con videoclip noico incluido: Shock The Monkey. Y el doble acetato PLAYS LIVE (1983) -reducido ahora a la mala a un solo CD- resumió muy bien esa época, destacándose I Go Swimming.
Y la fórmula rozó la perfección con SO (1986). Además de Sledgehammer y Big Time -que hasta pasaban como bailables en tonos-, fueron sus videoclips los que revolucionaron la pantalla chica por su animación computarizada y efectos especiales. Estamos hablando de hace veintitrés años atrás, donde no habían internet, celulares, ni el desarrollo informático existente del presente. También impactaron Red Rain y las sentidas baladas Don?t Give Up e In Your Eyes. Luego vinieron US (1992) -que trajo la depre Digging In The Dirt y la alegrona Steam- y UP (2002). Con todo ese bagaje de experiencia y creatividad, sus conciertos son un espectáculo sensorial sin precedentes, calificado como uno de los mejores del mundo; ahí están los DVD. Vienen con él además sus fieles músicos Tony Levin (bajo, ex KING CRIMSON) y David Rhodes (guitarra), entre otros. ¡Lima Rock City, a rendir honores a este maestro de maestros este viernes 20!
