El 20 de mayo de 2012, Takunda Mavima (18) se accidentó en su auto luego de haber tomado alcohol en su graduación. Pese a que no sufrió daño alguno, dos de los ocupantes - Tim See, 17, y Krysta Howell, 15 - murieron instantáneamente.
El último día del juicio, Mavima se dirigió a los familiares y amigos de la víctima y declaró: "Siento muchísimo haberle quitado la vida a estos dos jóvenes brillantes, inteligentes, maravillosos. Lo siento mucho".
Tras dictarse la sentencia que estableció que el joven afroamericano purgaría una condena de 30 meses a 15 años, la hermana de Tim See, Lauren, le hizo un pedido al juez.
"Les ruego que permitan que Takunda Mavima haga algo en la vida real, no lo envíen a la cárcel porque se volverá una persona amargada", dijo.
La foto se tomó en el momento preciso que el padre de See se acerca al joven para darle un abrazo y aceptar sus disculpas.