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Las autoridades de Afganistán han señalado que aproximadamente 80 personas han perdido la vida en las últimas horas en una ofensiva de los talibanes a pocos meses de la retirada de las fuerzas de la OTAN del país.
Las cifras presentadas también refieren que 12 personas fueron decapitadas en la zona, por lo cual el número total de decesos podría rondar los 100.
La última serie de ataques de los insurgentes se ha centrado en el distrito de Ajristan de la provincia oriental de Ghazni, después de las ofensivas en las provincias de Helmand, de Kandahar y de Logar.
Esta ofensiva tuvo lugar en plena transición política en Kabul, con el anuncio esta semana de la victoria del economista Ashraf Ghani en las presidenciales de junio y la formación de un gobierno de unión nacional con su rival Abdulá Abdulá, que denunciaba fraudes masivos
Durante el verano, los talibanes ganaron terreno en varias provincias afganas, aprovechándose de una crisis política en Kabul por los resultados de las presidenciales del 14 de junio.
El futuro gobierno herederá la ardua tarea de estabilizar el país al final de la misión de la OTAN (ISAF).
EL DATO
La ISAF, con 41.000 soldados, prevé retirar todas las tropas de combate del país antes del final de año, después de 13 años de presencia que no han permitido acabar con la rebelión de los talibanes.
