Amnistía Internacional: Guantánamo es un asunto pendiente
Amnistía Internacional: Guantánamo es un asunto pendiente

La organización Amnistía Internacional (AI) publicó un artículo, a pocos días de la elección presidencial estadounidense, en el que recuerda que EE.UU. tiene asuntos pendientes en materia de derechos humanos, como Guantánamo, donde todavía quedan 150 presos en espera de juicio tras más de una década.

AI continuará mostrando casos de individuos a los que "se les ha negado sus derechos fundamentales" y asegura que Estados Unidos "está fallando en el cumplimiento de sus obligaciones en materia de derechos humanos" según señala Rob Freer, investigador de AI.

Se señala que la "crueldad" de la detención indefinida la encarnan los 9 detenidos que han muerto bajo custodia estadounidense en Guantánamo, seis se suicidaron y tres fallecieron por causas naturales.

Si bien Guantánamo estuvo muy presente en la campaña de 2008, con la promesa del entonces candidato Barack Obama de que cerraría el penal, en ésta apenas se ha pasado de puntillas, aunque, según Freer, "hablar no es suficiente".

En su segundo día en el Gobierno, Obama firmó en enero de 2009 una orden ejecutiva para cerrar en el plazo de un año Guantánamo, un periodo que "pasó hace tiempo", como recuerda Freer, lo que ha prolongado un "limbo legal" en el que los detenidos pueden permanecer indefinidamente sin cargos y "sin indicaciones de que vayan a ser sometidos a un juicio justo, o liberados".

Para el activista es una cuestión de "voluntad política", ya que ese mismo año Obama anunció que cinco detenidos por los ataques del 11 de septiembre de 2001 serían juzgados en un tribunal federal en EE.UU., y sin embargo ahora van a ser juzgados por una comisión militar.

"Esto no es por un requerimiento legal, sino por política interna de EE.UU.", dijo Freer, quien aseguró que podrían haber sido juzgados en una corte federal "y todavía pueden", ya que para AI las comisiones "no cumplen con las medidas internacionales de juicios justos".

En su opinión, "se necesita la acción de todas las ramas del Gobierno para resolver la situación, siguiendo los principios internacionales".

En cuanto a los intentos de jueces de otros países, como el español Baltasar Garzón, de juzgar los casos de tortura contra estos prisioneros, Freer señaló que EE.UU. "ha fallado en su obligación legal internacional de asegurar la plena rendición de cuentas por tortura, desaparición y violación de los derechos humanos".

En este sentido, señaló que su organización seguirá presionando para que EE.UU. "haga lo correcto", pero, mientras, "otros países pueden y deben llevar a cabo investigaciones".