Las autoridades estadounidenses han declarado como un crimen de odio el violento ataque de un hombre ucraniano a uno de sus compatriotas en un bar de Brooklyn, luego de escucharlo hablar ruso mientras celebraba el cumpleaños de un amigo.
Andrii Meleshkov se encontraba disfrutando de manera amena con un grupo de amigos en el bar Signature, en Sheepshead Bay, el último lunes, cuando Oleg Sulyma, de 31 años, se acercó a su mesa y comenzó a insultarlos, revela el New York Post.
“Pareces ruso”, se burló Sulyma.
Meleshkov, de madre rusa, pero que nació y se crio en el este de Ucrania, le explicó al hombre que eran compatriotas, pero viajó hasta los Estados Unidos en 2015; sin embargo, el hombre no le creyó.
“Cambiamos a ucraniano para calmarlo, pero se estaba poniendo cada vez más agitado y comenzó a pedirnos que tradujéramos palabras para demostrar que somos ucranianos”, dijo Meleshkov al Post.
Sin embargo, a modo de prueba Sulyma los obligó a decir la palabra “Palianytsia”, un tipo de pan ucraniano y que los rusos tienen dificultades para pronunciar debido a su combinación de vocales y consonantes, según señalaron los fiscales a la prensa local.
“Si te equivocas, me saldré con la mía”, advirtió Sulyma.
Crimen de odio
Meleshkov se atrevió a pronunciar la palabra mientras intentaba pagar su cuenta para salir del lugar, pero eso puso más furioso a al atacante. En un momento de descuido, Sulyma cogió dos botellas de cerveza y las rompió para amenazar a su víctima.
“Me estoy preparando para matarte”, le dijo. “Agarró fragmentos afilados de vidrio de las botellas rotas y comenzó a avanzar hacia nosotros y nos dimos cuenta de que hablaba en serio y que iba a comenzar a cortarnos”, recordó Meleshkov.
“Todo sucedió en un abrir y cerrar de ojos. Pensé que me levantaría rápidamente, lo empujaría y saldría corriendo, pero luego se abalanzó y sentí que me golpeó en el cuello”, continuó.
El hombre se dio cuenta que la pelea se fue a los extremos cuando sintió cómo su cuerpo se empezó a bañar en sangre, proveniente de los cortes que tenía en la cara, cuello y orejas. Los médicos confirmaron que requirió de 17 puntos de sutura, en total.
“Estaba gritando para llamar a la policía y a los médicos… todo estaba cubierto de sangre y era una locura”, recordó.
“Tuve suerte… los paramédicos me dijeron que es mi segundo cumpleaños porque la herida que tenía en el lado izquierdo del cuello venía muy cerca de la arteria carótida”, lamentó.
Sin embargo, antes de que el atacante huya, Meleshkov se abalanzó contra él para detenerlo y esperar a que llegara la policía.
Sulyma, un trabajador de construcción civil radicado por 12 años en Brooklyn, fue acusado de crimen de odio y una serie de otros delitos como amenazas, acoso y posesión criminal de un arma.