A finales de abril, la noticia de un nuevo caso de bullying impacto en los Estados Unidos debido a la crueldad con la que fue sometido un niño de 6 años. Dominick Krankall resultó con quemaduras de segundo y tercer grado, luego que un amigo, supuestamente, le arrojara una pelota de tenis con fuego en la cara.
Sin embargo, mas de un mes después del incidente, la policía de Connecticut revelo unos videos que descartarían la teoría de un supuesto acoso por parte de un menor de 8 años, acusado de haberlo atacado, señala el New York Post.
La grabación fue entregada por una de las familias de los menores acusados y muestra en un principio a 4 niños, incluido Dominick, jugando en el patio trasero de una casa de Bridgeport. Aunque si se muestra que encendieron una pelota de fútbol, no revela ninguna agresión.
“Estaban interactuando en el patio trasero siendo niños”, dijo Laura Giacobbe, madre de uno de los niños acusados.
El clip del video muestra como Dominick se incendió después de patear o pisar un vaso de plástico lleno de gasolina que estaba en llamas. El menor se tira al suelo para apagar el fuego en su cuerpo y los otros amigos intentan auxiliarlo.
“Dominick no fue dejado allí para morir”, dijo Giacobbe. “Mi hijo Lorenzo, de 11 años, lo salvó, le tomó las manos desnudas y le apagó el fuego en la cara”.
No hubo signos de bullying
El pasado 10 de junio, cuando se dieron a conocer las imágenes, las autoridades confirmaron que no se encontró evidencia de que el menor haya sido intimidado o atacado por los otros niños.
“El video grabó a cuatro niños (de seis, siete, ocho y once años) jugando juntos en el patio trasero de la residencia”, dijo la policía de Bridgeport. “Al menos tres de los niños (de seis, siete y ocho años) fueron observados jugando con fuego y gasolina”.
Ahora, después de la revelación, Giacobbe asegura que presentara una denuncia a la familia de Dominick por haber difamado y humillado a su hijo. Asimismo, señaló que, durante la primera semana del accidente, recibieron amenazas.
“El departamento de policía tuvo que sentarse frente a la casa durante la noche para asegurarse de que no pasara nada”, indicó. “Se dijo que la casa sería incendiada, que iban a arrastrar a mi hijo y a mí por la calle y dejarnos sufrir el dolor”.
“Su hijo pudo ir al estadio de los Yankees mientras mi hijo se sentó dentro con miedo por todas las declaraciones que se hicieron contra él”, dijo Giacobbe, de 45 años, desde su casa en Bridgeport.
“Quiero que la arresten (a la madre de Dominick) porque no creo que sea justo. Es una difamación”, continuó Giacobbe. “Ha calumniado a mi familia. Hizo pasar a mi hijo por un infierno. Me hizo pasar un infierno. Quiero que la arresten por declaraciones falsas”.
Tras la noticia por el supuesto bullying, Dominick logró obtener casi $600,000 gracias a una recaudación de fondos en internet.