Unas 80.000 personas, según fuentes estudiantiles, se unieron hoy en Santiago de Chile a una marcha convocada por alumnos universitarios y de secundaria, a la que se unieron los profesores, en rechazo a la reforma educativa que impulsa el Gobierno.
Además hubo también movilizaciones de estudiantes y maestros en las ciudades de Arica, Iquique, Antofagasta, La Serena, Valparaíso, Concepción, Temuco, Valdivia y Puerto Montt.
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Los maestros, aglutinados en el Colegio de Profesores de Chile, llevan más de cuatro semanas de paralización nacional de funciones en rechazo a un proyecto de carrera docente que se debate en el Parlamento.
“La reforma educativa puede avanzar al ritmo que el Ministerio (de Educación) quiera pero en ningún caso va a terminar siendo una reforma legítima porque no incorpora a los actores sociales”, sostuvo la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), Valentina Saavedra, en una rueda de prensa previa a la manifestación.
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Una mayor transparencia, claridad y diálogo son algunas de las piedras angulares que vertebran las demandas de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), organización que agrupa a las federaciones estudiantiles de las universidades del país austral.
“Estas propuestas están hechas junto con los docentes, los secundarios y otros miembros del sistema educativo y creo que el único actor que falta que se sume a nuestras demandas es el ministerio”, apuntó Nicolás Fernández, presidente de la Federación de Estudiantes de la privada Universidad Diego Portales (Fedep).
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La marcha, que se convocó bajo el lema “Que el Gobierno no esconda la pelota, las y los estudiantes tenemos propuestas”, comenzó en el céntrico Parque Bustamante y avanzó por la Alameda Bernardo O'Higgins, para culminar en las cercanías del Club Hípico, un kilómetro al sur de la principal avenida de la ciudad.