(Agencia AFP) Este miércoles 16 de junio, China lanzó un cohete tripulado con tres astronautas para la construcción de su propia estación espacial. Esto como parte de una primera misión que será de tres meses.
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El cohete Larga Marcha-2F despegó, entre una nube de humo, desde el centro de lanzamiento de Jiquan, en el desierto de Gobi en el noroeste chino.
Después de unos 10 minutos alcanzó la órbita y la nave espacial se separó del cohete, en medio de sonoros aplausos en la sala de control.
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Esta misión será la primera vez en casi cinco años en que China lanza un vuelo espacial tripulado, que constituirá un récord para el gigante asiático.
La televisora estatal CCTV transmitió en vivo desde el interior de la nave espacial, donde los tres astronautas levantaron las viseras de sus cascos para mostrar sus rostros, uno de ellos sonriendo y saludando a la cámara.
Cámaras en el exterior de la nave mostraron imágenes en vivo de la Tierra a la distancia.
“Según informes del centro de control espacial de Pekín, el cohete Larga Marcha-2F envió la nave tripulada Shenzhou-12 a la órbita”, dijo Zhang Zhifen, director del centro de lanzamiento satelital de Jiquan.
“Los paneles solares se desplegaron exitosamente y ahora declaramos el Shenzhou-12 un completo éxito”, agregó.
En una ceremonia previa al despegue, los tres astronautas vestidos con sus trajes espaciales saludaron a un grupo de simpatizantes y trabajadores del centro espacial, quienes cantaron una canción patriótica que dice: “Sin el Partido Comunista Chino, no habría una nueva China”.
El comandante de la misión es Nie Haisheng, un condecorado piloto del Ejército de Liberación Popular, quien ha estado en dos misiones espaciales. Los otros dos tripulantes también son militares.
En medio de un contexto de tensiones con Occidente, el éxito de esta misión es una cuestión de prestigio para Pekín, que se apronta a celebrar el centenario del Partido Comunista Chino (PCCh), el próximo 1 de julio.
Vida espacial
Los astronautas se alojarán en Tianhe, único modulo de la estación que fue puesto el 29 de abril en órbita terrestre baja (a 350-390 km de altura).
A bordo, se dedicarán a labores de mantenimiento, instalaciones, salidas al espacio, preparación de futuras misiones y de próximas estadías de otros tripulantes.
El módulo tiene un espacio para cada uno de ellos, equipo para ejercicios y un centro de comunicación para email y videollamadas con el control terrestre.
Huang Weifen, del Programa Espacial Tripulado de China, dijo que los astronautas realizarán dos caminatas espaciales durante la misión, cada una de entre seis y siete horas.
Detalló que en las caminatas usarán trajes espaciales recientemente desarrollados.
El trío realizó más de 6.000 horas de entrenamiento, incluidas volteretas en una piscina con trajes espaciales, para acostumbrarse a las salidas para paseos en la ingravidez.
“Nos batimos en cada minuto para cumplir nuestro sueño espacial”, indicó Liu Boming, otro de los miembros de la tripulación. “Me entrené consagrándome a la causa”, añadió.
En su cápsula, los tres militares podrán elegir entre 120 alimentos en las comidas y entrenarse en una cinta móvil para mantenerse en forma.
La misión Shenzhou-12 constituye el tercer lanzamiento de los 11 que serán necesarios para la construcción de la estación, entre 2021 y 2022. Cuatro de esas misiones serán tripuladas.
Investigación científica
Además de Tianhe, que ya está en órbita, los dos módulos restantes --que serán laboratorios de biotecnología, medicina y astronomía-- serán enviados al espacio el próximo año.
Una vez concluida, la estación tendrá una masa de alrededor de 90 toneladas y se espera que tenga una vida útil de al menos 10 años, según la agencia espacial china.
El interés chino de tener su propia base humana en la órbita terrestre fue impulsado por la prohibición estadounidense para que sus astronautas estuvieran en la ISS.
Esta última --una colaboración entre Estados Unidos, Rusia, Canadá, Europa y Japón--, debe ser retirada en 2024, aunque la NASA dice que potencialmente podría seguir en funciones más allá de 2028.
“Estamos dispuestos a colaborar con todo país que se comprometa con el uso pacífico del espacio”, declaró a la prensa un alto funcionario de la CMSA, Ji Qiming.