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Un hombre compró un , pero en lugar de la consola, la caja tenía dos bolsas de piedras.

"La abrí (la caja) sólo para asegurarme de que todo estuviera dentro, de que todos los contenidos estuvieran dentro (…) Cuando la abrí, dije: '¡Oh, Dios!'", dijo Igor Baksht, quien adquirió el  en un Wal-Mart de Stapleton en Denver Colorado, Estados Unidos para regalarlo en el cumpleaños número 13 de su sobrina.

Al entregar el aparato, el empleado de Wal-Mart que lo atendió, le mencionó que ese equipo había sido devuelto con antelación y pesaba más de lo normal.

Aunque al principio la departamental se negó a realizar la devolución del dinero, después de que el caso se hiciera público, un representante de la tienda señaló que no podían confirmar lo sucedido.

Algo muy similar sucedió en un Wal-Mart de Alabama en diciembre de 2012, sólo que en vez de un , se trataba de un 3DS, y la caja traía papel higiénico en su interior.

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