Durante el último mes el aeropuerto de Phoenix, en Estados Unidos, se vio a obligado a cancelar varios vuelos entre la 1:00 pm y las 6:00 pm debido a las altas temperaturas que se registraron en dicho estado, las cuales incluso llegaron a superar los 49 grados centígrados. Esta situación hizo que miles se preguntaran qué relación existen entre las altas temperaturas y el vuelo de aviones y si esto es realmente peligroso.
Patrick Smith, un piloto retirado que se dedica a contar verdades y, sobretodo, desmentir los mitos sobre los vuelos, señaló en su libro 'Cockpit Confidential' de manera técnica por qué es realmente peligroso que los aviones despeguen a temperaturas mayores a los 48 grados centígrados.
De acuerdo al texto de Smith, los aviones de vuelos regionales, que son por general más pequeños, tienen una temperatura máxima de operación de 48 grados centígrados, mientras que aviones más grandes como el Boeing 747 y el Airbus, pueden soportar una temperatura de hasta 50 grados centígrados.
Las alas de los aviones están diseñadas de tal forma que se crea una menor presión cuando el aire fluye por la parte superior del ala y una presión mayor por debajo. Esta diferencia de presión crea una fuerza hacia arriba, lo que permite que el avión se mantenga en el aire. Sin embargo, se necesita un determinado flujo de aire para generar la fuerza necesaria, lo que es muy difícil de hallar en temperaturas demasiado altas debido que el aire tiene una menor densidad y no genera la fuerza adecuada.
Es por ello que tanto en el Medio Oriente como en una gran cantidad de países de América Latina, como el Perú, la mayoría de vuelos suelen ser en horarios nocturnos, de madrugada ya que en esas horas el avión puede alcanzar una mayor velocidad al despegar por la disminución de las temperaturas. (Con información de Infobae)