La vicepresidenta del Gobierno español y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, aseguró este miércoles que es necesario que Europa acelere la transición hacia una economía verde que permita tener más independencia energética de Rusia y poner fin al “chantaje” de Vladimir Putin.
“Tenemos que seguir este camino e independizarnos cuanto antes de esta situación y del chantaje que estamos sufriendo”, apuntó en un evento en Washington.
La actual “agresión de Rusia contra Ucrania”, añadió, “en realidad nos está diciendo que aceleremos la transición verde”. “Esta vez lo urgente coincide con lo importante”, agregó.
Calviño hizo estas declaraciones en un foro organizado por el Instituto Internacional de Finanzas (IIF) en la capital estadounidense, donde estos días se están celebrando las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial (BM).
En un evento previo, la reunión de ministros de finanzas para la acción climática, insistió en que de la misma manera que la pandemia mostró que se necesita acelerar la digitalización, la guerra a las puertas de Europa “nos enseña que necesitamos acelerar la transición energética, tanto por las razones que teníamos hace años, como con motivo de la necesidad de incrementar la autonomía estratégica en Europa”.
“Estamos ante un desafío multidimensional, un reto tecnológico, financiero, social y político y en ese contexto los ministros de finanzas y economía deben asegurar la estabilidad económica, conteniendo la inflación, apoyando el crecimiento y la creación de empleo y protegiendo a los más vulnerables”, añadió.
Calviño se encuentra en Washington con motivo de las reuniones anuales del Foro, que ayer publicó sus últimas previsiones económicas que señalan que España crecerá más de lo estimado este año gracias a la recuperación del turismo (el 4,3 %), aunque el año que viene se frenará más de lo esperado (el 1,2 %).
Aún así, España seguirá creciendo por encima de la zona euro, que en 2023 sólo avanzará el 0,5 %, con su principal economía, Alemania, sufriendo las consecuencias de su excesiva dependencia del gas ruso. En 2023 su economía retrocederá el 0,3 %, una situación que afectará fuertemente a España, según señaló hoy Calviño.
La evolución de la economía española durante los próximos meses “va a depender mucho de la guerra y de la economía alemana”, apuntó.
“Llamémoslo como es, Alemania es la economía más grande de la UE y es uno de nuestros principales clientes. Las exportaciones españolas son uno de los motores que nos deben impulsar de cara al futuro y por tanto es obvio que dependemos de Alemania”, explicó.
Calviño mantuvo esta mañana, contó, un desayuno con el ministro de finanzas alemán, Christian Lindner, quien le aseguró que “están bastante decididos a evitar que se materialicen los peores escenarios”.
La coordinación europea, agregó, es hoy más fundamental que nunca. “Debemos tomar una serie de medidas para que los europeos se unan en las compras de gas y revisar todo el marco regulatorio para desvincular los precios de la electricidad de los precios del gas”.
Además, expuso, es importante cumplir “el desafío” de “lograr el equilibrio correcto entre la política monetaria y fiscal”.
“Debemos seguir el camino de la responsabilidad fiscal, de reducir los déficits y las deudas para poder ayudarnos a que la política monetaria haga su trabajo de contención de la crisis”, puntualizó.
Fuente: EFE