Gabriel García Márquez: Las mejores frases del escritor que partió
Gabriel García Márquez: Las mejores frases del escritor que partió

La muerte del escritor colombiano Gabriel García Márquez es una pérdida irreparable para la literatura latinoamericana, como han dicho varios personajes del medio. No obstante, sus libros y las frases más valoradas de ellos perdurarán en la mente de los seguidores del gran Gabo. Estas son algunas de las más recordadas por los internautas:

"Los inventores de fábulas que todo lo creemos, nos sentimos con el derecho de creer que todavía no es demasiado tarde para emprender la creación de la utopía, donde las estirpes condenadas a cien años de soledad tengan por fin y para siempre una segunda oportunidad sobre la tierra." (Discurso de aceptación del Premio Nobel de Literatura, Estocolmo, 1982).

"Yo creo que todavía no es demasiado tarde para construir una utopía que nos permita compartir la tierra". (La mala hora)

"Escribo para que quieran más. Creo que es una de las aspiraciones fundamentales del escritor" (Revista "Siesta", España, 1977).

"Pero nunca se sintió bien entre los ricos. Solía pensar en ellos, en sus mujeres feas y conflictivas, en sus tremendas operaciones quirúrgicas, y experimentaba siempre un sentimiento de piedad". La prodigiosa tarde de Baltazar. (Los Funerales de Mama Grande)

"Le rogó a Dios que le concediera al menos un instante para que él no se fuera sin saber cuánto lo había querido por encima de las dudas de ambos, y sintió un apremio irresistible de empezar la vida con él otra vez desde el principio para decirse todo lo que se les quedó sin decir, y volver a hacer bien cualquier cosa que hubieran hecho mal en el pasado". (El amor en los tiempos del cólera)

"Si uno no crea, es cuando le llega la muerte". "Cuando no escribo, me muero; y cuando lo hago, también". (Entrevista con Efe, Sevilla, 1994).

"Uno no es de ninguna parte mientras no tenga un muerto bajo la tierra". (Cien años de soledad)

"Hay que jubilar la ortografía, terror del ser humano desde la cuna". "Simplificar la gramática antes de que la gramática termine por simplificarnos a nosotros". (Discurso de inauguración del I Congreso Internacional de la Lengua Española, Zacatecas (México), 1997).

"Amaranta (...) creyó que la había picado un alacrán.

-¡Dónde está! -preguntó alarmada.

-¿Qué?.

-¡El animal! -aclaró Amaranta.

Úrsula se puso un dedo en el corazón

-Aquí-dijo".

(Cien años de soledad)

"Si los intelectuales no despreciaran tanto la televisión, ésta no sería tan mala". ("Juventud Rebelde", La Habana, 1988).