El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, rectificó este miércoles puntos de su decreto que autoriza el porte de armas para determinadas categorías.
El decreto original, dictado el pasado 8 de mayo, generó una ola de críticas a la que se sumaron 14 de los 27 gobernadores del país, así como organismos de derechos humanos nacionales y globales, como Amnistía Internacional, y entidades del Poder Judicial.
El gobierno informó en un comunicado que la versión rectificada veda "expresamente la concesión del porte de armas de fuego portátiles (fusiles, carabinas, escopetas)" al ciudadano común, que solo podrá adquirir armas de menor calibre, llamadas "de porte".
Añadió el gobierno que "solo los propietarios rurales podrán adquirir ese tipo de armas largas y mantenerlas en sus casas".
El decreto que el 7 de mayo autorizó el porte de armas en la vía pública a determinadas categorías (políticos, camioneros, cazadores y quienes practican el tiro deportivo, entre otros) fue cuestionado ante la Justicia por consultorías técnicas del Congreso y organizaciones de la sociedad civil dedicadas al estudio de la violencia.
El lunes pasado, la fabricante brasileña de armas Taurus anunció que desde la publicación del decreto recibió 2.000 pedidos de su fusil semiautomático T4, lo que hizo subir 7,6% sus acciones en la Bolsa de Sao Paulo el martes. Sin embargo, este miércoles sus acciones registraban a inicios de la tarde un retroceso de 3,5%.