"Ley del silencio" se apodera de favela en Río de Janerio (FOTOS)
"Ley del silencio" se apodera de favela en Río de Janerio (FOTOS)

Coreia, una favela de, se encuentra bajo la "ley del silencio" desde la llegada de los militares el martes pasado, que tiene como objetivo controlar a las pandillas y el  en la zona

500 soldados enviados por el gobierno de Michael Temer se encargan de custodiar las calles, en un operativo que además de prohibir el tránsito vehicular, ha logrado callar a todos sus habitantes desde que empezó

"Ellos no hablan con nosotros. Solo levantan ese basurero", dijo uno de los vecinos a la agencia EFE y es que el temor se ha operado de los habitantes de Coreia, que solo se encargan de ver a lo lejos como las las  Brasileñas pasean por las calles con armas de fuego y tanques. 

Muchos de los vecinos de la zona se han visto obligados a observar por las ventanas con cautela y a no hacer preguntas.

Temor a represalias 

Según algunos medios, en aquellas calles donde no ha arribado el ejército, la situación de violencia sigue igual, pero en aquellos lugares donde las Fuerzas Armadas han llegado, la población se encuentra muy atemorizada a causa de las represalias en contra de los "soplones".

Según comentan algunos habitantes de Coreia, a las bandas criminales no "les tiembla la mano" al momento de castigar a quienes consideran que los han delatado con el ejercito, por lo que muy pocos aceptan abiertamente sentirse agradecidos con la presencia de estos en la comunidad. 

Violación de los derechos civiles 

La Defensoría Pública, ha denunciado que en algunos de los operativos realizados en Vila Kennedy y Vila Aliança, favelas vecinas de Coreia, miembros del ejército han tomado fotos a los habitantes y les han solicitado sus documentos personales para verificar que no tengan antecedentes penales. 

"Una grave violación de los derechos a la intimidad y la libertad de movimiento", se pronunció el organismo público, al sostener que estas intervenciones no permiten la libre circulación de los moradores de dichas favelas.

Cabe destacar, que la labor de estas unidades militares es limpiar la zona de los escombros que limitan su acceso y desmantelar al crimen organizado que desde hace muchos años se ha instalado en estas comunidades brasileñas.