Ciudad de México y una veintena de estados comenzaron a votar.
Ciudad de México y una veintena de estados comenzaron a votar.

México acude este domingo a las urnas con dos mujeres como claras favoritas para alcanzar la presidencia de un país asolado por la violencia del narcotráfico, donde un promedio de 10 mujeres son asesinadas cada día.

Claudia Sheinbaum, física y candidata del oficialismo de izquierda, y Xóchitl Gálvez, senadora de centroderecha de raíces indígenas, son las favoritas para gobernar hasta 2030 la decimosegunda economía del mundo, de 129 millones de habitantes.

Según un promedio de encuestas de la firma Oraculus, Sheinbaum, de 61 años y origen judío, aventaja a Gálvez por 17 puntos porcentuales aupada por la popularidad del presidente Andrés Manuel López Obrador, su padrino político.

En un lejano tercer lugar está el centrista Jorge Álvarez Máynez, un exdiputado de 38 años.

Confiada en el “voto oculto”, Gálvez, de 61 años, considera que la suerte aún no está echada.

Exitosa empresaria del sector tecnológico que centró su campaña en denunciar la “fallida” política de seguridad del gobierno, bautizada “Abrazos, no balazos” porque busca atacar prioritariamente las causas de la violencia, cree que parte de ese voto oculto provendrá de zonas golpeadas por los poderosos cárteles criminales.

Unas 450.000 personas fueron asesinadas en México y decenas de miles están desaparecidas desde 2006, cuando el gobierno de entonces optó por un cambio de estrategia sumando a los militares en el combate contra los grupos criminales.

Un candidato a un cargo local en el estado de Michoacán (oeste) fue asesinado a balazos horas antes del comienzo de las elecciones, informó la fiscalía regional.

Desde septiembre, una treintena de aspirantes a cargos locales fueron víctimas de la violencia, según la ONG Data Cívica.

Actos violentos obligaron el sábado a suspender los comicios en dos municipios de Chiapas (sur).

Para la instancia están convocados unos 100 millones de electores de este país con tres husos horarios. Las urnas abrieron a las 08H00 locales (13H00 GMT) de Quintana Roo (sureste), al igual que en parte de la frontera con Estados Unidos.

Ciudad de México y una veintena de estados comenzaron a votar a las 14H00 GMT y los del noroeste, con costa en el Pacífico, una hora después.

Visiones contrapuestas

Los seguidores de Sheinbaum consideran que garantiza el legado de López Obrador, que fue eficiente como alcaldesa de Ciudad de México (2018-2023) y que es “inspiración” para las mujeres de este país con altas tasas de violencia de género, donde unas 10 mujeres son asesinadas diariamente, si se suman feminicidos y homicidios dolosos, según ONU Mujeres.

“Una mujer presidenta será una transformación en este país, y esperemos que haga más por las mujeres. Acá la violencia contra la mujer está al 100%”, dijo la limpiadora Clemencia Hernández, de 55 años, que votará por Sheinbaum en Ciudad de México por seguir la línea de López Obrador.

“Nunca un gobierno antes se había preocupado tanto por los adultos mayores”, aseguró.

Durante su gobierno, López Obrador distribuyó millonarias ayudas directas a ancianos, jóvenes y discapacitados que sacaron a 8,9 millones de personas de la pobreza. Un tercio de la población aún vive no obstante en esa situación.

En una mesa de votación del acomodado barrio de Polanco, en Ciudad de México, Eunice Carlos, de 70 años, sostuvo que los seis años de este gobierno  “fueron un martirio”. “Ha sido un presidente muy nefasto, en primer lugar porque nos dividió (...) Mi voto va para la democracia con Xóchitl Gálvez”, dijo.

Ambas candidatas se comprometieron a mantener las ayudas sociales del actual gobierno.

“¡No llego sola, llegamos todas!”, expresó Sheinbaum al cerrar su campaña. “Es tiempo de mujeres y de transformación (...) Eso significa vivir sin miedo, libres de violencia”.

Por su parte, Gálvez reiteró que buscará recuperar el control de territorios controlados por el crimen y llevar “libertad donde hoy un gobierno autoritario quiere imponer sus decisiones”.

La opositora es respaldada por una coalición de los partidos tradicionales PAN, PRD y el PRI, que gobernó durante siete décadas hasta el año 2000.

Desafíos

La expansión del crimen organizado, que se nutre de otros delitos como la extorsión, “es el problema más intimidante” que deberá enfrentar quien llegue a la presidencia, opinó Michael Shifter, investigador del centro de análisis Diálogo Interamericano, con sede en Washington.

También tendrá el reto de mantener los programas sociales cuando el déficit fiscal subió a 5,9% y el crecimiento promedio en los últimos seis años fue de apenas 0,8%.

Otro desafío será la compleja relación con Estados Unidos, destino de 80% de las exportaciones mexicanas, especialmente si Donald Trump regresa al poder, advirtió Shifter.

Trump amenazó con deportaciones masivas de migrantes que cruzan por la frontera binacional de casi 3.200 km. Además, en 2026 los dos países y Canadá deberán renegociar su tratado comercial T-MEC.

En estos comicios la izquierda también busca ampliar la mayoría simple que tiene en el Congreso para aprobar polémicas reformas, incluida una del ámbito judicial, así como conservar la alcaldía de Ciudad de México, su bastión.