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La ola de calor que golpea actualmente Europa Occidental dejó este martes récords de calor en 64 localidades de Francia, donde varios incendios siguen activos, indicó el servicio de meteorología Météo France.
Los nuevos máximos históricos locales se registraron principalmente en la fachada atlántica, en el oeste de Francia, como en Biscarrosse (42,6ºC) o en la isla de Noirmoutier (39,7ºC).
“La jornada pasó claramente conforme a lo previsto. Por desgracia, era algo esperado”, indicó a la AFP Matthieu Sorel, climatólogo en Météo France.
Brest, en el extremo occidental de Francia, registró el lunes 39,3ºC, batiendo el récord anterior de 35,1ºC de agosto de 2003. “Más de cuatro grados en Brest es colosal”, subrayó el especialista.
El actual récord nacional de 46ºC se registró en 2019 en Vérargues (sur).
La ola de calor es la segunda registrada en menos de un mes en Europa. Para los científicos, la multiplicación de estos fenómenos es consecuencia directa del cambio climático.
En Francia, está acompañada desde hace una semana de dos gigantescos incendios cerca de Burdeos (suroeste), que ya carbonizaron 19.300 hectáreas de vegetación y obligaron a 34.000 personas, turistas o locales, a abandonar sus viviendas.
Uno de estos incendios, próximo a la turística Duna de Pilat, destruyó cinco cámpings próximos y obligó también a evacuar a los animales del zoo del Bassin d’Arcachon.
Un total de 363 de los 850 ya fueron trasladados a un parque de Burdeos, indicó el ministerio de Transición Ecológica, precisando que “una decena de animales” pereció por el calor y el estrés.
Un hombre fue detenido el lunes por el otro incendio, el de Landiras, y, según fuentes de la fiscalía de Burdeos, ya fue interrogado en 2012 por sospechas similares, en un caso que acabó archivado.
Fuente: AFP
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