Bogotá se alista para el regreso de las corridas de toros, un polémico espectáculo cancelado hace más de cuatro años por decisión política que vuelve el domingo por orden constitucional.
Cerrada para el toreo en junio de 2012 por el entonces alcalde Gustavo Petro, un izquierdista feroz opositor de la fiesta brava, la Plaza La Santamaría, una de las principales de Latinoamérica, reanudará la lidia con el Julián López "El Juli", el colombiano Luis Bolívar y el peruano Andrés Roca Rey.
"Hemos sufrido cuatro años de intolerancia, de persecución y estamos muy contentos de que la nueva administración nos entregue la plaza de nuevo para lo que fue construida", dijo a AFP Gonzalo Sanz de Santamaría, bisnieto del constructor del recinto, inaugurado en 1931.
Aunque la Alcaldía de Enrique Peñalosa, que asumió en 2016, también se ha mostrado contraria a la temporada taurina, la Corte Constitucional ordenó reabrir el histórico escenario en septiembre de 2014 y ratificó su decisión en febrero de 2015, al resolver un recurso interpuesto por Petro.
El tribunal consideró que el cierre vulneraba "el derecho a la libertad de expresión artística".
"Los toros son un espectáculo cruel, que no es conveniente para una sociedad civilizada que respeta la vida como queremos que sea la nuestra", afirmó Peñalosa el martes a periodistas.
Petro había cancelado unilateralmente el contrato de la Corporación Taurina de Bogotá (CTB) para administrar La Santamaría. Y a pesar de la orden judicial, no reabrió inmediatamente la plaza al aducir que necesitaba obras de mantenimiento, las cuales fueron realizadas los últimos meses. (AFP)