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"No somos perros", protesta Lidia Arribas. Como ella, miles de habitantes de la Cañada Real, uno de las mayores barrios de chabolas de Europa, se encuentran privados de electricidad, en momentos en que el termómetro descendió a -10ºC en la capital española. En la foto Amador García, de 45 años, y Ludivina Herrera, de 70, se sientan en su sala de estar en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real en las afueras de Madrid, luego de una fuerte tormenta de nieve. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Sin electricidad a temperaturas de -10°C

"No somos perros", protesta Lidia Arribas. Como ella, miles de habitantes de la Cañada Real, uno de las mayores barrios de chabolas de Europa, se encuentran privados de electricidad, en momentos en que el termómetro descendió a -10ºC en la capital española. En la foto Amador García, de 45 años, y Ludivina Herrera, de 70, se sientan en su sala de estar en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real en las afueras de Madrid, luego de una fuerte tormenta de nieve. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)

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Esta coyuntura, provocada según la policía por cultivos de cannabis cuyo alto consumo hizo que la red eléctrica colapsara, se ha prolongado desde octubre, pero adquirió un cariz dramático ahora que Madrid sufre una inusual ola de frío tras una histórica nevada el pasado fin de semana. En la imagen, Lidia Arribas, de 37 años, y Juan Fernández, de 36, llenan el depósito de un generador de gasolina en el patio trasero de su casa tras una distribución de alimentos y mercancías por parte de la Fundación Madrina en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Red eléctrica se encuentra colapsada desde octubre

Esta coyuntura, provocada según la policía por cultivos de cannabis cuyo alto consumo hizo que la red eléctrica colapsara, se ha prolongado desde octubre, pero adquirió un cariz dramático ahora que Madrid sufre una inusual ola de frío tras una histórica nevada el pasado fin de semana. En la imagen, Lidia Arribas, de 37 años, y Juan Fernández, de 36, llenan el depósito de un generador de gasolina en el patio trasero de su casa tras una distribución de alimentos y mercancías por parte de la Fundación Madrina en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)

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La situación ha llegado a ser denunciada por oenegés, por expertos en derechos humanos de la ONU e incluso por la estrella de cine Penélope Cruz. "Visto lo visto, viven mejor los perros que nosotros", prosigue Lidia, con 37 años y tres niños, quien, linterna en mano, entra en su vivienda, de paredes recubiertas con moho. Acurrucada bajo las cobijas, su hija de siete años, Ainara, dice que duerme con "la cabeza bajo la manta" para protegerse del frío y la humedad. En la foto, Juan Manuel Fernández, de 12 años, y Ainara Fernández, de 7, ven dibujos animados en la televisión en la habitación de su madre en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto: AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Situación denunciada por defensores de derechos humanos

La situación ha llegado a ser denunciada por oenegés, por expertos en derechos humanos de la ONU e incluso por la estrella de cine Penélope Cruz. "Visto lo visto, viven mejor los perros que nosotros", prosigue Lidia, con 37 años y tres niños, quien, linterna en mano, entra en su vivienda, de paredes recubiertas con moho. Acurrucada bajo las cobijas, su hija de siete años, Ainara, dice que duerme con "la cabeza bajo la manta" para protegerse del frío y la humedad. En la foto, Juan Manuel Fernández, de 12 años, y Ainara Fernández, de 7, ven dibujos animados en la televisión en la habitación de su madre en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto: AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)

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Situada al sur de Madrid, sobre una antigua ruta de trashumancia, la Cañada Real Galiana es una sucesión de precarias viviendas que se extiende por quince kilómetros, donde malviven 7.000 personas, sobre todo de origen marroquí o gitano. Su presencia en estos terrenos pertenecientes a la región de Madrid y situados cerca de una carretera, es tolerada desde hace unos treinta años. En la imagen, Yolanda Martín, de 47 años, se encuentra en el salón de su casa en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañaada Real, en las afueras de Madrid. (Texto: AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Precarias viviendas en una extensión de quince kilómetros

Situada al sur de Madrid, sobre una antigua ruta de trashumancia, la Cañada Real Galiana es una sucesión de precarias viviendas que se extiende por quince kilómetros, donde malviven 7.000 personas, sobre todo de origen marroquí o gitano. Su presencia en estos terrenos pertenecientes a la región de Madrid y situados cerca de una carretera, es tolerada desde hace unos treinta años. En la imagen, Yolanda Martín, de 47 años, se encuentra en el salón de su casa en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañaada Real, en las afueras de Madrid. (Texto: AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)

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En el barrio de chabolas, unos 4.000 habitantes se han visto afectados por las interrupciones eléctricas. Sin calefacción, el frío provocó la noche del domingo la hospitalización de una niña de tres años llamada Pilar "con síntomas de hipotermia", según Conrado Giménez, presidente de la Fundación Madrina, que distribuye víveres, mantas y bombonas de gas en la zona. En la imagen, Lidia Arribas, de 37 años, muestra el dormitorio de su casa en el sector 6 del chabolismo La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Unos 4.000 habitantes se han visto afectados por el corte eléctrico y la falta de calefacción

En el barrio de chabolas, unos 4.000 habitantes se han visto afectados por las interrupciones eléctricas. Sin calefacción, el frío provocó la noche del domingo la hospitalización de una niña de tres años llamada Pilar "con síntomas de hipotermia", según Conrado Giménez, presidente de la Fundación Madrina, que distribuye víveres, mantas y bombonas de gas en la zona. En la imagen, Lidia Arribas, de 37 años, muestra el dormitorio de su casa en el sector 6 del chabolismo La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)

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Patrullando la barriada, conocida como punto de venta de droga en la capital española, dos policías aseguran a la AFP que los cortes de electricidad son producidos desde hace tres meses por los cultivos de cannabis en algunas casas. En la foto se observa a un voluntario de la Fundación Madrina repartiendo paquetes de alimentos durante una distribución de alimentos y mercancías en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto: AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Reparten paquetes de alimentos para los afectados

Patrullando la barriada, conocida como punto de venta de droga en la capital española, dos policías aseguran a la AFP que los cortes de electricidad son producidos desde hace tres meses por los cultivos de cannabis en algunas casas. En la foto se observa a un voluntario de la Fundación Madrina repartiendo paquetes de alimentos durante una distribución de alimentos y mercancías en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto: AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)

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Un bebé de la zona sufrió hipotermia en diciembre último, según informaron relatores del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, que en un comunicado estimaron que la falta de electricidad "está poniendo en peligro la salud de unos 1.800 niños". En la foto, Conrado Gimenez, al centro, fundador y presidente de la Fundación Madrina, revisa su teléfono móvil antes de iniciar una distribución de alimentos en La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Naciones Unidas denuncia niños en peligro

Un bebé de la zona sufrió hipotermia en diciembre último, según informaron relatores del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, que en un comunicado estimaron que la falta de electricidad "está poniendo en peligro la salud de unos 1.800 niños". En la foto, Conrado Gimenez, al centro, fundador y presidente de la Fundación Madrina, revisa su teléfono móvil antes de iniciar una distribución de alimentos en La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)

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Naturgy, la empresa que surte gratuitamente energía a la Cañada Real, comenzó esta semana a suspender el servicio de las viviendas sospechosas de cultivar cannabis para permitir que la red pueda volver a funcionar. En la foto, Alvise Pérez, voluntario de la Fundación Madrina, descarga balones de gas durante una distribución de alimentos y mercancías en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Repartición gratuita de gas es suspendida en ciertos hogares

Naturgy, la empresa que surte gratuitamente energía a la Cañada Real, comenzó esta semana a suspender el servicio de las viviendas sospechosas de cultivar cannabis para permitir que la red pueda volver a funcionar. En la foto, Alvise Pérez, voluntario de la Fundación Madrina, descarga balones de gas durante una distribución de alimentos y mercancías en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)

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Pedro del Cura, alcalde de izquierda de Rivas-Vaciamadrid, uno de los municipios donde se encuentra la barriada, pide incrementar la capacidad de la red pues teme que se corte la luz a viviendas ajenas al narcotráfico. En la foto, un vecino transporta una botella de gas que recibió de la Fundación Madrina durante una distribución de alimentos y mercancías en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)
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Autoridad pide incrementar la capacidad de la red eléctrica

Pedro del Cura, alcalde de izquierda de Rivas-Vaciamadrid, uno de los municipios donde se encuentra la barriada, pide incrementar la capacidad de la red pues teme que se corte la luz a viviendas ajenas al narcotráfico. En la foto, un vecino transporta una botella de gas que recibió de la Fundación Madrina durante una distribución de alimentos y mercancías en el sector 6 del barrio de chabolas La Cañada Real, en las afueras de Madrid. (Texto AFP / Foto: Jaime ALEKOS / AFP)


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