Luis Fernando Intriago, un reconocido sacerdote de Guayaquil, fue sancionado por la Congregación de la Doctrina de la Fe, institución del Vaticano encargada de casos de abuso, por aplicar a menores un ritual no autorizado por la Iglesia Católica al cual denominaba la “Dinámica del Pecado”.
Dicho procedimiento "consistía en sesiones privadas en las que pedía a los menores de edad vestir ropa interior o desnudarse, aceptar ataduras y vendajes en los ojos, además de permitir contacto físico en forma de toques pero también de golpes, llaves de artes marciales y hasta descargas eléctricas", reveló la revista de investigación GK.
Los abusos habría sido cometidos cuando lideraba las bases juveniles en la iglesia Nuestra Señora de Czestochowa, en Guayaquil. Fueron 10 los hombres que denunciaron las prácticas del padre.
La denuncia ha conmocionado a la sociedad ecuatoriana que días antes conoció otros casos de pederastia que involucraban a un exsacerdote en la ciudad andina de Cuenca.
De acuerdo a la investigación, "Intriago fungió en Guayaquil como asesor espiritual del Sodalicio de Vida Cristiana", que lo apartó en 2014 de la organización tras conocerse sus prácticas.
Como se conoce, su fundador, Luis Fernando Figari, vive en Roma tras el escándalo de abuso sexual a menores en Perú, por el que el Ministerio Público ha solicitado su prisión.
Luego de que uno de los agraviados denunciara en 2014 al sacerdote ante el Arzobispado, la investigación en la Fiscalía no prosperó porque Intriago los demandó por injuria y delito de odio, lo que estacó las investigaciones.
La Fiscalía ecuatoriano inició en setiembre de 2017 investigaciones por abuso sexual y tortura. En tanto, Intriago espera la decisión final del Vaticano.
Respuesta de la Iglesia
A raíz de las denuncias, el arzobispo de Guayaquil, monseñor Luis Cabrera Herrera, informó hoy en una carta que se han iniciado dos nuevas investigaciones en contra de Intriago.En el documento aclara que los procesos penales iniciados anteriormente contra el sacerdote prescribieron porque las denuncias se presentaron más de cinco años después de haber ocurrido los hechos.
Sin embargo, destacó que "la Fiscalía ha abierto dos investigaciones más para determinar si los hechos descritos (últimamente) pueden tratarse como torturas, delito que aún podría no haber prescrito".
Y en un mensaje de reflexión, el religioso afirma que la "dinámica de pecado no está aprobada por la Iglesia católica bajo ninguna modalidad".
"Más aún, luego de haber escuchado sus testimonios, lo consideramos como un instrumento que atenta ante la integridad física, moral y espiritual de las personas", concluyó.
Comité contra abusos
Grupos sociales de Ecuador anunciaron hoy la creación de un Comité contra casos de abuso y violación por parte de representantes de la Iglesia católica, tras conocer las denuncias de supuesta tortura contra un sacerdote que practicaba extraños rituales de fe.Diane Rodríguez, activista transgénero del colectivo LGBTI de Ecuador, convocó hoy en una rueda de prensa a formar el "Comité contra la tortura, acoso y violación por parte de la Iglesia en Ecuador", para dar seguimiento a las denuncias de abuso y acoso sexual que involucren a representantes religiosos.
"Nos declaramos en lucha permanente contra la impunidad y contra las personas que cometen actos de pederastia", señaló Rodríguez y dijo que su colectivo no descansará hasta que los responsables "paguen con todo el rigor de la ley".
Rodríguez, que pertenece a la Asociación Silueta X, reprochó que los últimos casos de abusos atribuidos a sacerdotes no hayan sido resueltos aún por la Justicia ordinaria y recordó que en el caso del cura Intriago, él ha dirigido grupos juveniles en los últimos diez años, precisamente desde los que han surgido las denuncias.
"Hacemos un llamado a los operadores de justicia para que estos casos puedan sentenciarse a la brevedad posible y puedan dar como resultado la condena que merecen", añadió la activista que hoy también presentó un manifiesto de varios grupos sociales que se adhieren a la creación del Comité.
"No permitiremos que la impunidad presentada por quienes usan sotana transite campante por los tribunales de justicia", agregó Rodríguez e invitó a grupos "pro vida", que se oponen al aborto y a la diversidad sexual a sumarse al colectivo para vigilar los procesos contra los curas acusados de abusos.
También hizo un llamamiento a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana a que se sume a las campañas de denuncias y de exigencia de una reparación a las víctimas.
Estas denuncias "no son hechos aislados, por el contrario, son de los tantos casos que conocemos que no se han hecho público por el temor de las víctimas al rechazo y la vergüenza", reza el manifiesto.