El papa Francisco ya inició su primer baño de multitudes en su "papamóvil". Circuló durante media hora entre los peregrinos congregados en la plaza de San Pedro, algo nada sorprendente viniendo de un Papa que ya se ha saltado el protocolo en numerosas ocasiones para saludar afectuosamente a los fieles, pese al quebradero de cabeza que eso implica para los servicios de seguridad.
El Papa Francisco se bajó del papamóvil rompiendo el protocolo de la ceremonia para besar a una persona discapacitada que acudió a la plaza en los brazos de un familiar. Un noble gesto del nuevo Pontífice.
El Papa pronunció luego la esperada homilía en esta misa concelebrada por todos los cardenales presentes en Roma, y contará con la participación inédita en la liturgia de los hermanos franciscanos del convento de La Verna, situado en las montañas de Toscana.