Una mujer puertorriqueña fue víctima de una insólita estafa, cuando un hombre la llamó por teléfono y se presentó como ‘Jesucristo Rey’ solicitando su ayuda, porque estaba en aprietos.
El increíble hecho ocurrió en la provincia de Caguas, Puerto Rico, y se viralizó rápidamente en las redes sociales, luego que la mujer presentara la denuncia ante las autoridades locales.
La víctima, cuyo nombre no ha sido revelado, recibió una llamada de un número desconocido a su celular. Al responder, la persona al otro lado de la línea le aseguró ser Jesús, el hijo de Dios, y le pidió su ayuda porque estaba en problemas, señala El Tiempo.
De acuerdo con lo conversado, el estafador le indicó que estaba en el Aeropuerto Internacional de Miami y necesitaba con urgencia la ayuda de la mujer, quien había sido escogida por gracia divina.
‘Jesucristo’ tenía problemas al pagar un exceso de equipaje, por lo que solicitó a la mujer 500 dólares. La puertorriqueña no sospechó que se trataba de una estafa y procedió a realizar el envío del dinero.
Llegó hasta una agencia y realizó la transferencia con los datos entregados por el supuesto mesías.
Unas horas después salir del lugar la víctima entró en cuenta que le habían robado el dinero; sin embargo, esperó unos días para realizar la denuncia.
A pesar de que aún no logran capturar al estafador, las autoridades de Caguas ya refirieron el caso a la División de Propiedad y Fraude del Cuerpo de Investigaciones Criminales.
Otras estafas en la región
Las estafas de este tipo se están haciendo bastante comunes en Caguas, Puerto Rico. A través de llamadas, mensajes de texto o redes sociales, los ladrones han encontrado la manera de captar a sus víctimas.
Recientemente, un hombre denunció el robo de su dinero a través de Instagram. El sujeto señaló haber recibido una oferta de viaje por internet, así que decidió adquirir el plan.
Esta promoción incluía hospedaje y los pasajes a Punta Cana, República Dominicana, por lo que realizó un depósito por 1.250 dólares a través una aplicación bancaria; sin embargo, nunca más supo de los vendedores.