Definitivamente la forma en que hemos llegado al día en que cumplimos 200 años como república, no es la que muchos esperábamos. Tuvimos como antesala a este aniversario patrio una brutal pandemia de por sí trágica, que se vio agravada por la falta de capacidad del gobierno de Martín Vizcarra para hacer menos duro el drama que nos tocó vivir y que nos colocó, a nivel mundial, como el país que más muertos tuvo por cada cien mil habitantes. Peor no pudo ser.
Pero eso no ha sido todo. A la crisis sanitaria, económica y social que nos deja el COVID-19, se suma la llegada a la Presidencia de la República de un personaje improvisado y de dudosos antecedentes como Pedro Castillo, quien ha sido llevado al poder por un partido definido como “marxista leninista” que tiene a Vladimir Cerrón como cabeza visible, y que no deja de ofrecer una “revolución” como la que ensucia desde hace décadas los nombres de Cuba y Venezuela.
En estas horas previas a la toma de mando de la administración de Castillo y Cerrón, vamos viendo un adelanto de lo que podría ser “el gobierno del bicentenario”: no hay un gabinete designado en medio de rumores del posible nombramiento de impresentables, oportunistas, buenos para nada y hasta cercanos a bandas terroristas que solo tienen en la cabeza la idea fanática de llevar a cabo una asamblea constituyente sin amparo legal, instaurar un régimen comunista y traerse abajo la democracia.
Lamentablemente esto es lo que ha elegido la mayoría de peruanos en este bicentenario, con el entusiasta y militante apoyo de algunos que ahora, desesperados al quién es el que realmente manda acá, piden a Castillo que deslinde de su jefe Cerrón, un personaje que además -hay que reconocerlo- en todo momento ha sido sincero y nunca ha maquillado sus propuestas apocalípticas y trasnochadas, ni sus intenciones de implantar una dictadura comunista en el Perú. ¿De qué se sorprenden?
Sin duda es un bicentenario opaco, sin el brillo que hubiéramos querido. Han pasado 200 años desde la proclamación de la independencia de la máxima colonia española en esta parte del mundo, para tener que “celebrarla” en manos de Castillo, Cerrón, Dina Boluarte, Róger Nájar, Wilson Barrantes, Guillermo Bermejo y “Pinturita”, todos ellos bendecidos por Evo Morales. Dicen que los peruanos debemos ser optimistas, que nuestro país amado es grande y fuerte, pero bueno, es lo que hay por ahora.
