Muy difícil entender la lógica de los congresistas de Perú Libre, Cambio Democrático y otros bloques oficialistas que votaron a favor de la salida de Geiner Alvarado del cargo de ministro de Transportes y Comunicaciones (MTC) debido a las acusaciones de corrupción que hay en su contra, pero al mismo tiempo respaldan a rabiar la permanencia del profesor Pedro Castillo en la Presidencia de la República.

Por si no lo saben estos legisladores, al defenestrado Alvarado el Ministerio Público lo sindica como parte de una organización criminal que encabezaría nada menos que el jefe de Estado. Así que si el ministro censurado el jueves último está embarrado y no podía seguir en el cargo, lo está precisamente por ser parte de una banda que tiene como cabecilla al profesor, el mismo al que Perú Libre y compañía defienden con sus votos de cualquier intento de vacancia.

¿Cómo explicar que Alvarado sería un corrupto y Castillo no, si ambos pertenecerían a la misma banda? Los “generosos” recursos destinados para obras en el distrito chotano de Anguía, jamás hubieran llegado a esa jurisdicción sin que el presidente metiera la mano para beneficiar a su cuñada-hija que ahora está presa de manera preventiva. ¿El inamovible Alvarado actuó solo y el jefe de Estado no sabía nada? Dejen de tomarnos el pelo.

El caso de Alvarado no es aislado. Hay suficientes evidencias en manos del Ministerio Público, para darse cuenta que estamos ante el accionar de una mafia muy poderosa que busca la impunidad y que para ello no duda un usar al Estado para tal fin. Veamos el acoso palaciego que sufre el coronel PNP Harvey Colchado por cumplir su trabajo de buscar a los prófugos del entorno presidencial, los cuales podrían hablar y mandar a la cárcel al profesor.

La hipótesis de la Fiscalía es que todos los personajes que están presos, prófugos e investigados son parte de una misma organización que cuenta con un cabecilla debidamente identificado como Pedro Castillo, al que solo se puede investigar de manera preliminar debido a su investidura. Si no la tuviera, estoy seguro que ya tendría que estar tras las rejas de manera preventiva, algo que quizá suceda apenas deje el cargo de presidente de la República.

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