Es momento de salir de la persecución servil al poder oculto materializada en información  producto del “chuponeo”  para destruir a quienes se consideran  enemigos. Llegó el día en que los titulares de diversos diarios del país, no han podido ocultar y era un secreto a voces, la utilización de las instituciones y  algunos medios para crear enemigos públicos depositarios de inexactitudes, falsedades y desprestigio, para así mantener los intereses de alguna facción dentro del Ministerio Público, Junta Nacional de Justicia. Si la razón que determinó la suspensión de la ex fiscal de la Nación, Patricia Benavides, fueron las palabras de su exasesor Jaime Villanueva, las mismas palabras del citado, respecto del fiscal supremo Pablo Sánchez, o sobre la participación de los citados “fiscales héroes” en la supuesta confabulación con Gorriti para “cercar” al expresidente Alan García y encarcelar a Keiko Fujimori, ¿tendrán el mismo efecto en la Junta Nacional de Justicia, MP y PJ?

Aún cuando la justicia no se ampara en dichos, quienes festejaron la suspensión de Benavides, la muerte de García y la cárcel para Keiko, hoy en consecuencia deben exigir las sanciones administrativas y penales a los involucrados. Resulta aleccionador para estos sectores, pues en un Estado Constitucional de Derecho no se actúa por revancha, acomodo o “amiguismo”. Siempre debe prevalecer la Constitución y los derechos que consagra. No obstante, me temo que la desfachatez se impondrá a la razón y al derecho.