Pocas veces he visto una campaña tan llamativa. El nombre es pegajoso y la promotora, Cecilia García, es una periodista huancaína inteligente y muy articulada. Su historia es válida y sólida. Fue víctima de un asalto, chapó a su choro, lo llevó a la comisaría y unas horas después estaba libre. Por eso le agregaron a la frase “Chapa tu choro” lo de “y déjalo paralítico”.

Los ciudadanos formamos un Estado en un territorio donde compartimos raíces, costumbres, leyes y gobernantes. Nos ponemos de acuerdo, aunque sin pensarlo mucho, para organizarnos y convivir pacíficamente. Elegimos autoridades y crecemos bajo el imperio de la ley, que es la que nos guía, nos permite y nos limita, y forma el tipo de sociedad que decidimos tener.

El monopolio de la justicia y la violencia siempre lo tiene el Estado. Pero en aquellos lugares sin la presencia de esta entidad, los peruanos aplican la justicia con sus propias manos. Sin Estado hay que defenderse creando seudoautoridades y aplicando justicia consuetudinaria.

El problema es que hoy el Estado no responde, aunque físicamente esté presente. Si en mi cuadra roban, la comisaría no hace nada, menos la Fiscalía, y si reclamo, nadie resuelve. Llega el momento de hacer algo, porque no puedo vivir así.

Nos quejamos de la falta de educación y salud. Ahora le agregamos falta de seguridad y autoridad. Pero igual debemos concluir que “Chapa tu choro” no puede tener éxito. Debe morir y ya. Para eso requerimos de un Estado eficaz. Y siento que a pesar del ministro del Interior, ¡solo queda esperar a los que vengan!