“El virus ha venido para quedarse”, ha manifestado con claridad la titular del Comando de Operaciones COVID-19, Pilar Mazzetti. Cuando se levante la cuarentena, las personas involucradas en actividades que se vayan permitiendo, deben estar suficientemente informadas de las medidas de prevención además de mantener la distancia social.

La educación es obligatoria en los niveles inicial primario y secundario, es gratuita en las entidades públicas, el Estado garantiza el derecho a la educación. Esta norma constitucional, afronta la realidad de la discriminación. Una educación de menor calidad en entidades públicas y de mayor calidad en las privadas. Hoy el coronavirus la hace más evidente, por las posibilidades de acceso a internet, y a una buena señal de TV para la práctica de la Tele Educación.

Al reanudarse las labores, este esquema discriminatorio se mantendrá, pero no podemos permitir que el coronavirus lo refuerce. Son vidas las que se perderían. Las condiciones de prevención y sanitarias en los colegios públicos y privados deben ser iguales. Es urgente dotar de agua y servicios higiénicos a los que no lo tienen, y mejorar las condiciones de los existentes, además de abastecerlos de desinfectantes, jabón líquido y alcohol.

El 95 % de los padres de familia no están conformes con la manera como se viene enseñando. Frente a ello se debe evaluar la posibilidad de que durante el período de suspensión, no avance el cronograma de clases para el sector público, y que las actividades sean evaluadas cuando las clases se retomen. En el sector privado, si las instituciones educativas se aseguran de que todos sus estudiantes y docentes tendrán las herramientas y los recursos para acceder al aula virtual, podrán avanzar con el plan escolar, ello supervisado con autoridades educativas. Es decir, de todas formas las clases presenciales se deberán recuperar, en beneficio de los alumnos. Si algo nos deja esta terrible situación es que se deben destinar más recursos para educación y salud, y más inversión en tecnología, para garantizar el acceso y cubertura de los sectores más vulnerables en relación a los servicios de internet y televisión.