Congreso: un nuevo estilo
Congreso: un nuevo estilo

Mañana domingo se elegirá la Mesa Directiva del Congreso y todo indica que serán dos listas en disputa: la encabezada por Luis Iberico, patrocinada por Fuerza Popular, el Apra y el PPC; y la de Vicente Zeballos, promovida por Solidaridad Nacional y otras fuerzas. Lo único que falta para cuajar la segunda lista es que el Partido Nacionalista desista de presentar una lista propia en un intento en los descuentos de mantener el control del Legislativo.

No parece factible esta posibilidad. El nacionalismo solo votaría por Zeballos -al igual que su aliado Perú Posible- siempre que eso signifique bloquear un triunfo de sus únicos enemigos políticos reales: el fujimorismo y el aprismo. Y a ellos se unirían los otros enemigos políticos de ambos grupos, básicamente Perú Posible, Acción Popular y algunos remanentes de la izquierda no nacionalista. Como no parecen alcanzar los votos, el evitar el triunfo tras bambalinas de apristas y fujimoristas es lo máximo a lo que pueden aspirar realmente.

Tres lecciones deja esta nueva compulsa de fuerzas.

Primero, que se vuelven a quedar en el camino sempiternos postulantes al cargo de presidente del Congreso. Emblemático el caso del congresista García Belaunde, que a la hora nona soltó una “bomba” contra Iberico para dibujarlo como corrupto encubierto. Pretendió así desarmar la coalición que había trabajado y ganarse las avemarías del oficialismo. Cuando eso no ocurrió -una vez más-, tuvo que allanarse a apoyar a Zeballos.

Segundo, que la tónica de la elección congresal la marcan Fuerza Popular y el Apra. Es con ellos o es contra ellos. Quizás Solidaridad Nacional sea una excepción: está bien con todos y aprovechó esa ventana de oportunidad para introducir a Zeballos con buen pie en la contienda.

Tercero, que gane quien gane, el Congreso no podrá estar manejado por el presidente Humala y su esposa, por lo menos no como hasta ahora, donde los presidentes del Parlamento eran apenas secretarios o secretarias de la pareja alojada en Palacio.

No sé si a fujimoristas y apristas les convenga ganar el Congreso y así volverse de alguna manera co-responsables de parte de la cuenta en rojo de este gobierno en todos los niveles. Pero en cualquier caso, primará un nuevo estilo en un Congreso que, más allá de la medianía de sus actuales miembros, es actor importante de cara a no permitir que el régimen actual empeore aún más las cosas.

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