Cuidado, viviendas que son un peligro

Las primeras lluvias comienzan a presentarse en diferentes pueblos del territorio nacional, en algunos de ellos la presencia de este fenómeno es constante y deja serios daños materiales, como también los primeros damnificados que perdieron sus viviendas y tierras de cultivo.

Parte de estas desgracias -se ha dicho hasta el cansancio- pueden prevenirse si el poblador respeta los lugares en donde puede instalarse, en especial que estos sean seguros, que no representen peligro alguno y no pongan en riesgo la integridad de las personas.

De estos ejemplos existen varios, en especial por la imprudencia de instalarse en cauces de quebradas para construir sus viviendas, sin importar la gravedad que se da en épocas de lluvias, cuando ingresan huaicos y destruyen todo a su paso. Esto lo hemos vivido en los primeros tres meses de este año que va camino a extinguirse.

Lo que sorprende es que ciertas autoridades, coludidas con la informalidad, reconocen a las viviendas instaladas en dichas zonas y las dotan de los servicios básicos, pese a estar prohibido y que se debería sancionar ejemplarmente.

Existen las leyes que imposibilitan la construcción de casas en estos lugares, pero a pesar de ello el desafío a la naturaleza continúa y lo que es peor, poco o nada hacen las autoridades correspondientes que deberían velar por la integridad de las poblaciones. Aún hay tiempo para realizar operativos de control a estas zonas y ver qué construcciones son un peligro.