Esteban trabaja como conductor de taxi y todos los días madruga para lavar su auto, revisar el estado de las llantas y confirmar que su vehículo está en buenas condiciones para la jornada. Es el orgullo de toda su familia, pues sale a trabajar muy temprano y maneja con un cuidado excepcional; es consciente que su auto es su herramienta de trabajo y no puede ponerla en riesgo porque afectaría sus ingresos.

Todos los peruanos deberíamos ser conscientes de cuidar lo que tanto esfuerzo nos ha costado conseguir; pero, sobre todo, minimizar las situaciones que podría poner en riesgo lo que representa el sustento de nuestras familias.

La pesca industrial trabaja con un fuerte compromiso en el cuidado de los recursos para garantizar su sostenibilidad. Por ello, el promedio de la biomasa de anchoveta es de 9.2 millones de toneladas en los últimos 15 años y es el resultado de un trabajo consciente entre las autoridades, científicos, empresarios y trabajadores del sector que están comprometidos con el cuidado de los recursos y el desarrollo sostenible del país.

La industria es la más interesada en cuidar los recursos del mar, pues de ellos depende el sustento de más de 250 mil familias y más de 3,500 MYPES que viven de la pesca; pero, sobre todo, cuidarlos eficientemente para que se mantengan en abundancia en el mar peruano para las futuras generaciones.

Recordemos que el Mar de Grau nos ofrece muchísimos recursos, entre ellos el más abundante: la anchoveta y gracias a ella se genera empleo; aporta a la salud y contribuye a reducir la pobreza, por eso hay que cuidarla. Próximamente se dará inicio a una nueva temporada de pesca y será una nueva oportunidad para reafirmar nuestro compromiso hacia una pesca responsable, que cuide los recursos, proteja el medio ambiente y contribuya al desarrollo sostenible de las comunidades.