Casi cualquier candidato puede ganar las elecciones aún. Ello si se dan cuenta de que quien definirá la elección es la nueva clase media peruana y si logran ofrecerle lo que de verdad necesita y lo que le es importante.
El Perú tiene ahora 50% de clase media. Y son esos peruanos los que día a día salen de sus casas a trabajar, compran electrodomésticos, algunos tienen auto, gastan en colegios y universidades, les preocupa la buena salud, viajan a provincias de vacaciones y de hecho tienen un pariente en el extranjero.
Entonces, candidatos, ¿ustedes creen de verdad que les importa cuánta regalía ha pagado Camisea, el costo de la refinería de Talara, el canon, las constructoras brasileñas en el Perú y el uso del Fondo de Estabilización Fiscal?
No. Eso es política para los políticos, no lo que le importa a la clase media, que estudia, trabaja, ve Netflix en su Smart TV, compra en un mall, estudia inglés y come en el patio de comidas. Estos peruanos tienen su negocio propio y quieren que crezca y no retroceder perdiendo lo que tienen.
Esta clase media pagará por educación de calidad. Votará por quien le asegure educación supervisada, evitando la “bamba”. Por quien le demuestre que sus hijos llegarán al colegio seguros, que no robarán sus casas y no serán asaltados en la calle. Votará por quien le permita hacer trámites los sábados y por el que demuestre que le dará más tiempo familiar evitando horas de transporte.
Esa clase media votará por quien le dé valor a sus familias y a sus vidas. Por quien de verdad haga del Perú un país mejor.
