EE.UU.: La estrategia de Donald Trump

El magnate Donald Trump está imparable. Ya está casi a un paso de coronarse como candidato del Partido Republicano para las elecciones presidenciales en los EE.UU., que deberán realizarse en el próximo mes de noviembre. Pero ¿qué ha hecho este señor ajeno a la política y cercano a los negocios para lograr apuntalarse en estos meses de campaña como un serio candidato presidencial? Trump ha entrado en la psique de sus compatriotas y los ha desnudado en el problema que para ellos representa el terrorismo y sus consecuencias. La gran mayoría de las personas en EE.UU. no ha podido salir del acto traumático que devino del impacto que produjeron los atentados en las Torres Gemelas de Nueva York en 2001. No quieren que se vuelva a producir un episodio tan nefasto como el de esa infeliz ocasión. El precandidato los ha sentido y por eso capitaliza ese estado emocional, es decir, el de un temor permanente de que vuelva a suceder. Por eso, le saca lustre a su descubrimiento pronunciando palabras duras para con los grupos terroristas que vienen operando en el Medio Oriente y otros lugares sensibles del planeta. En efecto, Donald Trump acaba de expresar que los terroristas “tienen sus días contados”. El empresario ha asegurado que tiene la fórmula para acabarlos y a la gente parece no importarle las excentricidades ni las ideas descabelladas del multimillonario, que se muestra como el hacedor de la paz y la seguridad en un país lleno de temores. Las personas quieren resultados y Trump pareciera encarnarlos. Queda claro, entonces, que están esperanzadas en el neoyorquino, que se ha comprometido en derrotar al Estado Islámico. Mientras los líderes republicanos no saben qué hacer para detener el alza del precandidato, Trump sigue ganando delegados y mirando la Convención Nacional que lo podría nominar candidato.