En tiempos tan aciagos que nos ha tocado vivir por efecto de la pandemia declarada mundialmente por el COVID-19, el Parlamento Andino, como órgano clave del Sistema Andino de Integración, ha sabido responder acertadamente a la altura de las responsabilidades institucionales que le fueron conferidas por el Acuerdo de Cartagena.

Ya antes de la declaratoria de emergencia en nuestros países, el Parlamento Andino aprobó una recomendación para combatir y prevenir el coronavirus en la región andina, invocando a los países a diseñar planes y programas para evitar la propagación del virus COVID-19, así como a adoptar acciones conjuntas de prevención, vacunación, cercos epidemiológicos, cuarentenas, intercambios de información y tratamientos curativos entre los países miembros.

En plena pandemia, aprobamos diecisiete recomendaciones que tienen por objetivo la adopción e implementación de estrategias multisectoriales para reducir los impactos negativos del coronavirus.

Entre las más destacadas se aprobaron para prevenir y combatir el coronavirus en la región andina; para promover actividades académicas por televisión y radio para estudiantes de preescolar, básica primaria y secundaria en los países andinos; para la prevención, mitigación y atención del COVID-19 entre la población carcelaria; para implementar acciones en materia de conectividad al servicio de internet que garanticen el derecho a la educación; para prevenir y mitigar la violencia intrafamiliar durante las medidas de aislamiento obligatorio en la región Andina; para el fortalecimiento de la ciberseguridad durante la crisis sanitaria por el brote de COVID-19.

Ante la difícil situación que están atravesando los ciudadanos andinos, aprobamos la entrega de recursos financieros para cooperación, a cada una de las Representaciones Parlamentarias Nacionales, para su inversión en los sectores más vulnerables de nuestros países. En el caso del Perú, hicimos una donación de 1,000 kits de desinfección y seguridad conteniendo mascarillas quirúrgicas, frascos de alcohol, guantes y jabón antibacterial, para las internas y sus hijos, así como para el personal del Instituto Nacional Penitenciario, que se encuentran en los establecimientos Virgen de Fátima y Anexo de Mujeres.