Los responsables del Ministerio de Salud capturado por Vladimir Cerrón, deberían rendir cuentas al país y también a la Fiscalía por la gravísima denuncia que se ha formulado acerca de la colocación de dosis de la vacuna Moderna mayores a las recomendadas, que a modo de cuarta dosis ha sido administrada en su mayoría a médico.

El Colegio Médico del Perú ha indicado que son cientos de profesionales de la salud los que ha reportar efectos secundarios mucho mayores a los habituales, luego de lo cual se supo de la “equivocación” de los responsables del proceso de inoculación, algo que trató de ser pasado por agua tibia por el ministerio que ahora está a cargo del segundo de cerronista Hernán Condori.

Es muy probable que estemos ante un efecto de la salida de profesionales y expertos del mencionado sector, que ha sido relevados por allegados al líder de Perú Libre, a quien el presidente Pedro Castillo ha entregado ese vital ministerio como parte del cuoteo que practica, antes de priorizar la capacidad de los profesionales que son reclutados.

Lo sucedido es grave y tiene que haber responsables. La salud de muchas personas ha sido puesta en riesgo por quienes deberían cuidar de ella. No es poca cosa.