Si hubo una constante en los mensajes a la Nación del presidente Vizcarra es el llamado al compromiso de todos. En cada uno de ellos, el mandatario, además de dar cuenta de las medidas del gobierno para luchar contra el coronavirus que está golpeando al Perú más que a otros países, apelaba a la participación de los peruanos.

Durante el confuso mensaje de ayer donde, además, dio a conocer la política llamada “Ciudadanía hacia una nueva convivencia social” y amplió el estado de emergencia hasta el 30 de junio. Vizcarra volvió a utilizar su fórmula, pero en esta ocasión fue más allá.

Pidió a la ciudadanía que no solo evite las conductas que puede propiciar el contagio sino que nos instó a cambiar de comportamiento y anteponer el bien común por encima de “comportamientos de carácter individual”.

También habló de una segunda fase de la lucha contra el virus y anunció una serie de flexibilizaciones a las medidas de aislamiento para la reactivación de la economía, tan duramente golpeada por la pandemia. El mensaje ha dejado más dudas que certezas, especialmente por el rumbo de nuestra economía. Queda acatar, pero también estar observantes del destino hacia el cual estamos yendo.