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La Municipalidad de San Román ha construido una planta de tratamiento de residuos sólidos en la Comunidad Campesina de Huanuyo, Cabanillas, a la que se pretende llevar alrededor de 140 toneladas diarias de basura de las 160 que produce Juliaca.

Pobladores de los distritos de Cabanillas (San Román), Cabanilla, Santa Lucía (Lampa) y Mañazo (Puno) se oponen a su puesta en funcionamiento. Temen que contamine su medio ambiente, poniendo en peligro sus actividades agropecuarias y vida cotidiana.

La desconfianza en las autoridades se repite en las últimas gestiones, generando rechazo a las acciones por resolver el tema del recojo de basura.

Los orígenes del problema están en haber permitido que alrededor del depósito sanitario de Chilla se construya viviendas, otorgándoseles licencia de construcción y dotado, parcialmente, de servicios de agua y luz, pese a ser áreas bajo riesgo sanitario.

Ni la Municipalidad, ni los ministerios del Ambiente y de Salud, ni el Gobierno Regional, han logrado obtener la aceptación de la población, llegando a una situación de permanente emergencia, ya que no se puede recoger y tratar adecuadamente la basura que generan los pobladores citadinos.

Es necesario que las poblaciones aledañas a Huanuyo otorguen una tregua al Municipio, permitan depositar los residuos sólidos y se demuestre, por parte de las autoridades responsables, que se les da un tratamiento adecuado protegiendo la salud de los habitantes. De continuar esta situación de enfrentamiento permanente, perdemos todos.