El Jurado Nacional de Elecciones (JNE) iniciará hoy la evaluación de las apelaciones de Fuerza Popular a los fallos que rechazaron sus reclamos de nulidad de actas electorales. La mayoría de peruanos estamos de acuerdo que se llegue a fondo para esclarecer cualquier sombra de irregularidad en este proceso. Lo más importante es la legalidad del triunfo de cualquiera de los dos candidatos. Por ello, el JNE tiene una responsabilidad mayúscula.

Está claro que si esta institución no acepta los pedidos de la nulidad de actas que llegaron fuerza del plazo determinado, los resultados oficiales no demorarán mucho en anunciarse. Sin embargo, si se permite la ampliación este proceso se dilatará. Más allá del tiempo que se emplee lo más importante es saber lo que realmente sucedió en la segunda vuelta. Es que la transparencia prometida por el JNE se debe construir desde la verdad. Así que hay que esperar con calma. No pueden continuar en escena algunas corrientes que exacerban los enfrentamientos. Las reacciones desaforadas e irracionales no solucionan nada. Solo pueden generar desenlaces peores. Por ejemplo, generar una grave crisis económica. En ese sentido, los líderes y seguidores de Perú Libre y Fuerza Popular deben recibir un impacto de realismo que los ayude a asumir las cosas con moderación y prudencia.