El Perú es un país pesquero y la de anchoveta es el buque insignia de nuestras pesquerías. A todos los peruanos nos debe llenar de orgullo que  la pesquería de nuestra anchoveta sea admirada en todo el mundo por diferentes instituciones internacionales, y no solo por su abundancia y buena gestión , sino porque es un recurso clave que multiplica la producción acuícola a nivel mundial,  y por ende, contribuye en la alimentación de miles de millones de personas en todo el mundo. Asimismo, contribuye enormemente a la salud mundial gracias al aceite que produce, el omega 3. Seguridad alimentaria y salud pública, son cosas que aporta la industria de anchoveta al mundo.

Gran responsabilidad la de la industria pesquera que emplea a más de 250 mil personas en los diferentes puertos del país, dinamiza la actividad económica para alrededor de 3,500 MYPES a nivel nacional. La pesca es uno de los motores de la economía que deben estar encendidos para continuar el proceso de recuperación económica que tanto esperan los peruanos, por ello, lo que requiere el sector es un clima de estabilidad y reglas claras para poder continuar aportando al crecimiento sostenible del país. Las evidencias saltan a la vista; cuando se toman decisiones oportunas y eficientes, los resultados son favorables, tal como ocurrió este año en la primera temporada de pesca en la zona centro norte del país. Por último, debemos sentirnos orgullosos de contar con una institución tutelar como es el IMARPE, que, a lo largo de estos 60 años de vida institucional, ha estudiado y comprendido el comportamiento de nuestros recursos marinos en beneficio de todos los peruanos. En el Perú somos pesca, seámoslo siempre.