Una marcha contra el play station

En 1996, el movimiento islámico Talibán prohibió la televisión en Afganistán luego de acusarla de contaminar los valores, la religión y la educación. Ese año clausuró el único canal local, Sin embargo los afganos importaron masivamente antenas satelitales y otros fabricaban estos aparatos de forma casera. Resultado: la mayoría del país veía televisión extranjera.

En 1998, el ministro de la Prevención del Vicio y Promoción de la Virtud de Afganistan fue más radical. Ordenó que la gente se deshaga de sus televisores y antenas y amenazó con movilizar a la policía para que ingrese a las casas a destruirlos. Amenaza que se cumplió. Los aparatos fueron hechos añicos. Los talibanes, miembros del movimiento conducido por estudiosos radicales del Islam, condenaron toda forma de entretenimiento porque atentaban contra la cultura y las buenas costumbres de la nación. De esta forma aislaron a la población de la televisión.
No es el caso, pero algunas actitudes de jóvenes que marchan contra la llamada “TV basura”, son tan intransigentes y fundamentalistas que asustan. Protestar con carteles acusando de “putas y maricones” a los que laboran en programas juveniles es intolerancia (por decir lo más suave) en su máxima expresión. Ingresar a una galería, a una tienda o a una peluquería en provincias y obligar a que no vean “Esto es guerra” y que cambien de canal es autoritarismo. Romper lunas y destruir bienes de una estación de televisión es vandalismo.
Estos muchachos hablan y gritan como si la televisión fuera de ellos y de nadie más. Es evidente que los avances tecnológicos han acrecentado la enorme influencia que la televisión posee sobre la conciencia de la gente y para algunos, mantener la rentabilidad del show implica flexibilizar sus principios y con los dedos apretando la nariz matizar sus escrúpulos. Sin embargo, también influyen el internet y hasta los videos juegos.
Un día en una calle limeña, hubo una discusión de dos conductores luego de un leve choque. Todo terminó en algunos empujones. Un menor, que acompañaba a uno de los protagonistas de la trifulca, le dijo a éste medio en serio medio en broma: “Tío, deja de pensar como la gente buena y piensa como los del play station, con un balazo lo asustabas”. ¿Se vendrá una marcha contra los play station?