La pandemia de COVID-19 no ha terminado y el Perú, como uno de los países que en el mundo ha sufrido más sus estragos con miles de muertos y contagiados, además de ver devastada la economía, debería ser el último en bajar la guardia no solo desde la autoridad, sino también desde el quehacer de los propios ciudadanos.
Se ha advertido que estamos iniciando una cuarta ola de contagios, y eso no puede ser dejado de lado. Si bien la primera y la segunda ola fueron brutales, y la tercera no lo fue tanto porque ya había un proceso de vacunación en curso, debemos mantener los cuidados a fin de evitar contagios, incluso cuando se dice que la letalidad de las nuevas variantes del virus no es tan alta.
Somos un país con un sistema de salud precario, y cualquier incremento de casos debería ser motivo de alarma. Mantener el uso de mascarillas incluso en espacios abiertos y la distancia social, aun cuando ya no es obligatorio, siempre es necesario, así como el evitar las aglomeraciones.
De otro lado, desde Correo hacemos un llamado a los ciudadanos a que cumplan con ponerse las dosis de vacuna indicadas para cada edad. Es la mejor forma de estar prevenidos y salir airosos de esta enfermedad a casi dos años y medio de su llegada, sigue entre nosotros.