CARMEN RAMOS
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Alrededor de 276 instituciones educativas que funcionan en la región Junín, no están en condiciones óptimas para albergar a los escolares que volverán a clases a partir del 1 de marzo, revela el informe del área de Infraestructura elaborado por la Dirección Regional de Educación de Junín.
El riesgo es alto y ante la ocurrencia de un sismo, por ejemplo, estos planteles de material rústico en su mayoría, se desplomarían, porque se trata de construcciones que superan los 60 años de antigüedad.
Los colegios están ubicados en las zonas más deprimidas por la pobreza, como son Río Tambo, Pangoa, Pichanaki y otros sectores de Satipo y Chanchamayo. Otras se sitúan en las zonas altoandinas de La Oroya, Tarma, Junín y del valle del Mantaro.
De las 2761 instituciones educativas de la región, el 75% de planteles están en condiciones regulares, tras el mantenimiento hecho con el dinero que asignó el Gobierno Central desde el año 2008, solo el 15% están en condiciones aptas para recibir al alumnado.
La DREJ solicitó a los directores iniciar las gestiones ante el Ministerio de Educación y el Gobierno Regional de Junín para construir nuevos colegios, además considera conveniente utilizar el dinero de mantenimiento e infraestructura para comprar carpetas.
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