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Una ágil maniobra del conductor de la empresa de transportes Ticllas salvó a más de 40 pasajeros de morir la madrugada de ayer por el kilómetro 61 de la carretera central Huancayo-Huancavelica.
El reloj marcaba las 06:00 horas cuando la central de emergencia 105 comunicó a la Dirección Territorial de la Policía de Huancavelica que el ómnibus de la empresa de transporte Ticllas sufrió un accidente por el kilómetro 61 de la carretera Huancayo Huancavelica, en el centro poblado de Antaccocha.
Los efectivos constataron que la llanta derecha del vehículo de placa única de rodaje A8V-741 estaba incrustada en la cuneta de la vía.
El conductor del ómnibus, Nider Quispe (30), manifestó que en la curva, metros más abajo, un vehículo particular venía de frente en su carril por lo que optó en esquivar el choque frontal dirigiendo el vehículo al lado contrario del abismo llegando a incrustarse en una cuneta.
Aparte de los daños materiales, varios de los pasajeros tuvieron lesiones y que fueron atendidos por personal del Samu. Entre ellos, Teodora Jurado (45) diagnosticada con policontuso parpado izquierdo y Teresa Chancha con lesión en la naríz.